Juan Ramón López Muñiz está feliz en el Levante UD. Al menos, es lo que desprenden sus palabras en una entrevista que ha concedido al programa 'Deportes COPE Valencia' en el que incluso habló de una posible renovación antes incluso de conseguir el objetivo del ascenso, lo que le ataría para la próxima temporada de forma automática. "A todo el mundo le gusta que le reconozcan su trabajo. Estoy contentísimo en la ciudad, con el club, la plantilla. Desde el primer día la familia encajó al completo. No tengo prisa pero estaríamos encantados de seguir aquí toda la vida", manifestó.
De todos modos, Muñiz tiene claro cuáles son los tiempos para hablar de su futuro. "Con Tito, Carmelo y el presidente la relación es extraordinaria. A todo el mundo le gusta que le reconozcan su trabajo pero soy consciente de cómo es el fútbol. Lo que hoy va bien mañana puede ir mal, la clasificación es vital para los entrenadores y depende de cómo te vaya así te valoran. Sé cómo va el tema de las renovaciones y soy una persona que da tranquilidad para todo el mundo, no doy prisa", explicó. "Trabajo para una empresa y para conseguir algo tengo que conseguir unos objetivos. Si conseguimos los objetivos, perfecto, si lo valoran antes, también, estoy contentísimo", agregó.
"Con Tito, Carmelo y el presidente la relación es extraordinaria pero la clasificación es vital para los entrenadores, trabajo para una empresa y para conseguir algo tengo que lograr los objetivos"
Un tema que empieza a estar sobre la mesa, al menos del debate público, es el mercado de invierno. Y para que haya fichajes primero tendrían que salir futbolistas de la plantilla. Y eso es algo que no le gustaría a Muñiz. "Me gustaría que terminásemos todos. Hay gente que está jugando más minutos pero todos tienen un papel, los que juegan más estarán contentos, los que no tendrán algo a lo mejor por ahí y puede que quieran salir, pero estoy muy contento con la plantilla porque todos aportan su granito de arena y están dando competencia", recalcó.
Y es que el entrenador tiene claro que, pese a su buena gestión de grupo, la mayor parte del mérito de que nadie se salga del redil es de los futbolistas. "Todo depende de la colaboración del grupo y de los jugadores individualmente, por eso nos preocupaba que el vestuario fuese un grupo, que supiese llevar las decisiones con entereza, ese grupo da puntos. Si queremos conseguir objetivos, no lo consiguen once, lo consiguen los 22, incluso alguno más del filial. Encima aquí hay nivel, los dos jugadores que hay por posición tienen un nivel muy parejo", concluyó el entrenador granota.