El Levante UD tiene margen suficiente como para permitirse pinchar en Oviedo. Se han hecho las cosas muy bien en el arranque de la temporada y por eso no preocupa que el equipo haya sacado un punto de seis posibles en los dos últimos partidos, ante el Cádiz en el Ciutat la pasada semana y este sábado frente al Oviedo. Dos históricos que se le han atragantado a los granotas, que no han sido capaces de marcar gol en los dos choques.
No existe ni ansiedad ni nada por el estilo, pero es verdad que al Levante le han cogido la medida y los rivales se encierran por dentro, acumulan gente en la frontal el área y le está costando superar ese muro que tanto gaditanos como ovetenses pusieron en la primera media hora del partido. En Oviedo se confirmó que el Levante ha perdido un poco de fuelle, es normal porque el ritmo de punto que llevaba era impensable en una categoría en la que prima la igualdad, a excepción del Levante, que aventaja al segundo en tres partidos de diferencia.
EL Oviedo era un rival directo, que se ha puesto tercero en la tabla y que supo frenar a la perfección a Morales, Jason y Roger, el trío ofensivo granota que ha llevado tantas alegrías a la parroquía granota en este arranque de Liga 123. Esta segunda derrota del curso provoca sobre todo después de empatar contra el Cádiz, que el Levante esta ante su primer bache de la temporada pero nada preocupa porque ha sido algo excepcional en una temporada que esta saliendo todo de manera perfecta.
El Levante tiene por delante el reto de buscar alternativas de ataque para saber romper esas defensas que se le están atragantando. La solución de entrar por fuera no está saliendo bien porque muchos de los centros al área no encuentran rematador y ahí los rivales se hacen fuertes Hay colchón suficiente, no hay preocupación, pero Muñiz lo que le ocupa es buscar alternativas de juego para según qué situaciones de partido. El Levante tiene que hacer unos pequeños retoques para volver cuanto antes a la senda de la victoria. Por cierto no se ganó en Oviedo y no se pudo celebrar esas tres victorias seguidas fuera de casa que el conjunto granota no logra desde la temporada 2011-12 cuando se clasificó para la Europa League con JIM.