El Levante UD dio un paso casi definitivo hacia la permanencia en Primera División, y si no se puede decir todavía que lo ha logrado es porque las matemáticas se empeñan en decir lo contrario, pero todo el mundo sabe que el conjunto granota competirá en la máxima categoría en la temporada 2018-19. Por ello, una vez más, los futbolistas celebraron en el vestuario, en este caso de San Mamés, el espectacular triunfo frente al Athletic. Una tradición ya en el Levante UD y no es para menos pues, desde el aterrizaje de Paco López en su banquillo, se ha convertido en un equipo totalmente diferente.