El Levante UD se ha visto convulsionado en las últimas horas, aunque era algo que se podía barruntar por las informaciones que surgieron hace unas semanas, por la más que posible marcha de Carmelo del Pozo al Deportivo de La Coruña. Tino Fernández quiere reclutar a uno de los hombres fuertes del ascenso a Primera División y de la permanencia y, básicamente, le separa del club blanquiazul su cláusula de rescisión. Pero el segoviano no es el único que tiene ofertas ya que el Espanyol también está valorando pescar en el Levante UD y, en este caso, a su pareja de baile Vicente Blanco 'Tito'.
El club perico se encuentra sin director deportivo desde que destituyese a Jordi Lardín junto a Quique Sánchez Flores por la mala deriva de resultados de los catalanes. Óscar Perarnau, su director general deportivo, cree que Tito cumple con el perfil ideal para ser el máximo responsable de la planificación en el Espanyol, siendo uno de los nombres que tienen en la terna, aunque también sabe que el de Benidorm tiene un año todavía por delante con el conjunto granota.
Hay que recordar que Tito, como Carmelo del Pozo, firmó en verano de 2016 un contrato de tres temporadas, es decir hasta 2019, con el Levante. Quico Catalán, después de una temporada con altibajos de resultados y fuertes tensiones lógicas por haberse visto cerca del descenso (aunque en ninguna jornada ha ocupado esas posiciones), ha respirado y empieza a ver las cosas más claras. Es decir: que se ha cumplido el objetivo por segundo año consecutivo, en ambos casos de forma holgada, y que salvo algunas excepciones y errores el balance de los fichajes se inclina bastante más a lo positivo que a lo negativo. Además, varios jugadores se han revalorizado con esta recta final de campeonato. Todo ello, se lo ha trasladado ya el presidente a su máximo responsable deportivo, que ya acelera en operaciones para el próximo ejercicio.
Aunque el Consejo de Administración que se ha convocado este jueves 3 de mayo no tiene en su orden del día hablar de aspectos deportivos, la situación que se ha generado con la posible marcha de Carmelo del Pozo podría cambiar los planes. Quico Catalán, que mantiene la confianza en Tito, y su equipo tienen que decidir si potencian la dirección deportiva y dan alguna muestra efectiva de esta fe en el de Benidorm, al que le quedaría sólo un año por delante teniendo que ejecutar la contratación de un secretario técnico. El actual director deportivo está a gusto en el Levante aunque a la expectativa de lo que decide el órgano rector.