El Levante se enfrentó al Villarreal en el primer amistoso de la pretemporada, y lo hizo acompañado de sus seguidores. Los granotas comenzaron el calentamiento rodeados de unos pocos aficionados que se animaron a llegar antes de tiempo pese al calor. Poco a poco, el Parador El Saler fue llenándose hasta completar el aforo. Parece ser que la afición no quería dejar pasar la oportunidad de conocer cómo juegan los nuevos integrantes del equipo.
Tal y como anunció el propio club en sus redes sociales, la asistencia al encuentro estaría limitada a 150 personas, el máximo que puede albergar la zona. Una vez completado el aforo, el Levante anunció que no podría acudir más gente. A las siete de la tarde, el Parador ya se encontraba lleno y preparado para albergar el primer amistoso de la pretemporada granota.
El encuentro estuvo reñido desde el comienzo, aunque las ocasiones más claras fueron para el Villarreal. Finalmente, el conjunto amarillo terminó por adelantarse en el minuto 26 gracias a un gol de Cazorla tras un disparo desde fuera del área que Aitor no pudo detener.
El Levante se fue al descanso por detrás en el marcador. Ya en la segunda mitad, Paco López optó por cambiar completamente el once. Parecía que este funcionó mejor en ataque, pues en los primeros quince minutos realizó numerosas aproximaciones al área rival. Pero esta alegría no duró mucho, pues en el minuto 64 llegaría el segundo gol del Villarreal, esta vez por parte de Bacca. A partir de entonces, el conjunto amarillo controló totalmente el encuentro.
Finalmente, el Levante consiguió recortar distancias con un gol de Bardhi en el 87. El equipo se lanzó más al ataque, aunque lo cierto es que todavía quedan muchos detalles por mejorar. Así pues, la afición se marchó con un sabor agridulce, pues pese a la derrota parece que el equipo cuenta con jugadores en plena forma.