El Levante UD se enfrentó al Éibar en su tercer partido en el Ciutat de Valencia en LaLiga Santander tras ganar por 2-1 ante el Villarreal CF en la primera segunda jornada y por 2-0 al Real Valladolid en la tercera. Los pupilos de Paco López no lograron la victoria al empatar a cero ante un conjunto vasco que logró generar peligro en el marco levantinista a lo largo del encuentro.
Lo primero que pudimos aprender de la derrota del Levante UD es que el equipo logró tener la precisión que se requería en los últimos metros. En nivel de juego los granotas superó en algunos momentos al conjunto visitante, a pesar de eso cuando se llegaba a los metros finales ni los delanteros ni los centrocampistas lograban acertar con el pase final o con la definición de cara a la meta rival.
Otra de las cosas que pudimos ver es que el conjunto valenciano se desconecta, a lo largo del encuentro se pudo ver como los jugadores no lograban hacerse con el control del partido y vieron como los visitantes hacían y deshacían a su antojo en algunos momentos.
Otra de las cosas que aprendimos es que al Levante le falta gol, a pesar de que sus cuatro delanteros ya se han estrenado en el campeonato nacional de Liga, a los granotas les falta presencia en el área y instinto matador.
A pesar de la falta de gol, el Levante si que pudo sacar conclusiones positivas del encuentro, el rendimiento de Aitor Fernández, el guardameta ha demostrado que puede dar muchos al club de Orriols con sus paradas y ese tipo de porteros pueden hacerle la vida más fácil a un equipo que tiene como principal objetivo salvarse cuanto antes.
Una vez finalizado este encuentro, los granotas se enfrentarán al Real Betis dentro de dos días, en el que será el sexto partido del Levante en LaLiga Santander 2019/2020.