El Levante UD volvió a marcharse de vacío una temporada más del estadio del Atlético de Madrid. Los de Paco López no pudieron evitar la derrota este sábado en el Wanda Metropolitano en un partido que fue decidido por otro gol encajado a balón parado, el que metió el central Felipe. Anteriormente, Correa y Roger establecieron un empate a uno que duró muy poco en el luminoso. Así, la pegada de los del Cholo y los reflejos de Oblak decidieron un choque en el que el Levante no puso lo suficiente para ganar pero mereció algo más.
El Levante arrancó el partido en el Wanda con el miedo metido en el cuerpo. En apenas 50'', el Atlético de Madrid creó una triple ocasión clara que, incomprensiblemente, no supo convertir. Aitor repelió el disparo de Correa antes de que Joao Félix se topase con la defensa granota. El segundo rechace cayó a los pies de Saúl Ñíguez, que pudo controlar y acomodar el cuero para fusilar pero tan fuerte fue el golpe que se marchó muy alto.
Tras el susto inicial, los granotas comenzaron a tomar el pulso al partido. A los siete minutos llegó el primer aviso visitante por mediación de Cabaco. El charrúa remató bien a la salida de un córner y su testarazo se marchó rozando el larguero ante la impasible mirada de Oblak. Apenas dos minutos después, el Atlético de Madrid contestó con una acción similar de Felipe pero esta vez, el balón fue atrapado por Aitor.
Los del Cholo demostraban pegada en cada aproximación y esto quedó claro en el 14' con el primer tanto local. La jugada entre Thomas, Trippier y Correa fue espectacular y al primer toque. El mediocentro buscó al lateral y este sin dejarla caer mandó al corazón del área para que Correa batiese de primera a Aitor. (1-0)
El Levante no se arrugó y golpeó seguidamente gracias a la estrategia. Campaña botó una falta lejana en busca de Roger, que se desmarcó para pegarle de primeras y a la media vuelta. La fortuna se alió con 'El Pistolero' ya que el balón tocó en el cuerpo de Morata y cogió una rosca insalvable para Oblak. (1-1)
Sin embargo, poco le duró la alegría a la parroquia levantinista pues el Atlético volvió a adelantarse prácticamente en la siguiente jugada con un buen remate de cabeza de Felipe, que esta vez sí sorprendió a Aitor que no pudo evitar el segundo tanto rojiblanco. (2-1)
Tocaba remar otra vez al Levante y Rochina trató de sorprender con uno de sus trallazos lejanos. Le emuló Saúl Níguez pero sin suerte ni precisión, intentando resarcirse de la ocasión clara fallada al inicio del encuentro.
A pesar de los duros varapalos, el Levante no le perdía la cara al encuentro, ni mucho menos. Seguía buscando un segundo gol y eso implicaba que habían más huecos en la zona de retaguardia granota. Lo aprovechó Morata para quedarse casi sólo ante Aitor pero la aparición de Cabaco con todo fue estelar para impedir la ocasión.
El Levante apretaba en tres cuartos de campo bajo la batuta de Campaña y el Atlético de Madrid buscaba la sorpresa a través de las transiciones rápidas en ataque. Joao Félix robó el cuero en la medular y buscó un gol magnífico pero salió muy desviado. El siguiente jugador local en buscar el tanto fue Correa, obligando a Aitor a una gran estirada.
La lucha continuó durante los últimos minutos de la primera mitad pero el partido se marchó al descanso con el 2-1.
Morales ingresó en el terreno de juego al inicio de la segunda mitad por Mayoral para buscar su velocidad y el desborde en el uno contra uno. Durante los primeros instantes, los granotas se toparon con un Atlético de Madrid rocoso en defensa.
Cabaco vio la amarilla en el 51' tras propinar un codazo a Oblak en un saque de esquina.
El duelo se tornaba en ida y vuelta gracias a las acometidas de uno y otro equipo. Joao Félix golpeó muy duro desde la frontal en el 57' pero su disparo no fue problema para Aitor. Tampoco del de Saúl Ñíguez en el 61', que se marchó desviado.
El Atlético llegaba cada vez con mayor peligro y un cabezazo de Correa en el 68' obligaba a Aitor otra vez a emplearse a fondo.
Paco López buscaba algo más de velocidad con la entrada de Hernani en sustitución de Rochina.
En 77', una gran triangulación entre Correa, Trippier y Joao Félix estuvo a punto de sumar un tanto más para los locales. El remate del luso desde la frontal se marchó rozando el poste izquierdo de la meta granota.
El Atlético de Madrid imponía un ritmo vertiginoso ante el que el Levante se movía a remolque. Aún así, Bardhi cazó un rechace para internarse en el área rojiblanca con un gambeteo y posterior disparo. Oblak demostró el motivo de que sea considerado como uno de los mejores guardametas del mundo con una parada con la que desesperó al macedonio.
En el 91', Vukcevic vio la quinta tarjeta amarilla de la temporada antes de una nueva ocasión de los locales pero el disparo de Correa se marchó por centímetros.
El Levante protagonizó un último arreón y Hernani puso un balón de oro en boca de gol a Bardhi. El macedonio remató bien pero Oblak volvió a hacerse gigante para hacer una parada espectacular y salvar a su equipo.
Ya no hubo tiempo para más y el Levante perdió.