Con el objetivo de la permanencia en LaLiga Santander certificado desde hace ya un par de jornadas, en el Levante UD ya trabajan en la confección de la plantilla para la próxima temporada. En este sentido, en las últimas horas ha sonado con fuerza la posibilidad de que Javier Puado refuerce la delantera granota. Un futbolista que llegaba en invierno al Real Zaragoza para sustituir, precisamente, a Raphael Dwamena. Pero cuya salida del RCD Espanyol, el equipo dueño de sus derechos, se complica tras el descenso del cuadro catalán a la categoría de plata del fútbol nacional.
Desde la entidad de Orriols ya se han puesto en contacto con el Espanyol para pedir precio por Puado, tal como avanza El Periódico de Aragón. Pero la respuesta de los barceloneses ha sido clara: no saldrá por menos de la cláusula de rescisión, la cual se eleva a 40 millones desde que debutara en la categoría reina del fútbol español como perico en 2018. Una cantidad inasumible para el Levante, y también para el Zaragoza, que no tiene una opción de compra en el contrato de cesión y quiere contar con él la próxima temporada en caso de ascender a Primera División.
Y es que en Cornellá son conscientes de que deberán armar un buen equipo para retornar cuanto antes a LaLiga Santander, y Puado ha demostrado este curso -sobre todo antes del parón- que tiene condiciones para destacar sobradamente en Segunda. Además, pese al potencial económico de la entidad desde la llegada del chino Chen Yansheng, jugadores como Raúl de Tomás, el 'Monito' Vargas, 'Chuky' Ferreira o incluso Jonathan Calleri tienen muchas papeletas de dejar el club.
A todo ello hay que sumar que Puado tiene contrato con el club blanquiazul hasta junio de 2022. Pero el Levante cuenta con una clara ventaja para convencer al futbolista, y no es otra que jugar en LaLiga Santander.