El Levante UD volvió a hacerlo y plantó cara a todo un Real Madrid en el segundo partido de LaLiga Santander, el primero en el Ciutat de València. Los de Paco López tutearon al rival, remontaron el gol inicial en el minuto cinco, se pusieron por dos veces delante en el marcador y al final, sólo un Vinicius sideral impidió que sumaran una nueva victoria contra los merengues. El brasileño marcó el 3-3 un golazo tan bueno o mejor que el 2-1 obra de Campaña. Un partido de los que enamoran.
Fue un choque épico, lleno de golazos y en el que hubo de todo. Hasta Vezo acabó de portero.
De inicio Paco López apostó por su clásico 1-4-4-2 con De Frutos por la derecha y Campaña por la izquierda y Morales junto a Roger en punta. Era un 4-3-3 cuando atacaba pero pronto los planes iniciales se fueron al garete. No en vano, la decisión de adelantar líneas le costó un disgusto al conjunto granota. En el minuto 5 David Alaba buscó a Benzema que rompió a Vezo por velocidad y la puso franca atrás para que Gareth Bale batiera a placer a Aitor Fernández. Perdía el Levante a las primeras de cambio para disgusto de su parroquia que volvía al Ciutat.
Al Levante, a pesar de los detalles de Campaña, le duraba poco el balón y así es difícil meterle mano a un buen equipo como es el Real Madrid. Un cabezazo de Roger fue lo más destacado en estos primeros minutos. Por el contrario, el Real Madrid empezó a acumular llegadas y, aunque no eran demasiado peligrosas, avisaban de las intenciones de los de Ancelotti.
Tras la pausa de hidratación, el Levante adelantó líneas y empezó a presionar cerca del área blanca, pero la calidad de estos hacía que los esfuerzos cayeran en saco roto. Más bien al contrario, salían con clase y seguían generando peligro en el área granota. Alaba, Bale o Isco rozaron el gol antes del 40. Era un monólogo y sólo la defensa numantina del Levante impidió que se llegara al descanso con un marcador mucho mayor. Isco, novedad ante la lesión de Modric, marcaba el tempo del partido y ni Melero, ni Campaña, ni Radoja podían pararlo.
El descanso le venía mejor al Levante que a nadie y quedó demostrado en la primera jugada de partido. Campaña, Melero y Morales trenzaron la jugada para dejarle solo al pistolero que no falló. El punta, solo ante Courtois no perdonó y puso el 1-1.
A la contra, el Levante se encontraba feliz y parecía un equipo radicalmente distinto al de la primera mitad. Ancelotti sentó a Isco, Bale, Hazard y Lucas Vázquez en pos de una reacción que no llegaba.
Paco López reaccionó y sacó a Malsa y Pablo Martínez por Melero y Roger. Buscaba refresco el técnico valenciano. El partido se estabilizó sin opciones. El Madrid dominaba el balón pero no encontraba huecos y el Levante esperaba agazapado para dar el zarpazo final.
Tuvo que ser en una estirada granota cuando el Madrid aprovechó el espacio. Casemiro la pone al especio para que Vinicius Junior que se marcha en carrera y, ante la oposición de Miramón, define con la izquierda el 2-2. Quedaba un cuarto de hora y ahora era el Real el que tenía la moral para ir a por el choque.
Paco López volvió a mirar al banquillo y sacó a Bardhi y Cantero por Campaña y Morales. Había que llegar fresco y vivo al final y fue santa palabra. En el primer balón que tocó el macedonio -un saque de falta- acabó en gol de Róber Pier quien, aprovechando un rechace de Alaba anotó el 3-2.
Álex Cantero, de nuevo en una contra, pudo sentenciar pero, tras driblar a Courtois, remató al palo con la portería vacía. En la jugada siguiente sería el Madrid quien la tuvo, pero Aitor Fernández, primero, y Vezo, después, evitaron la igualada que, sin embargo, llegaría en otra gran jugada personal de Vinicius. Regatea, se escora y, al más puro estilo Henry, remata al palo largo donde el balón se coló con clase.
Franquesa saltó al campo justo en el momento en que VInicius se iba de nuevo a por el gol. Aitor Fernández, sin cambios, tocó con la mano, y fue expulsado. Apenas quedaban unos minutos de sufrimiento, pero Cuadra Fernández añadió 6 más.