La cantera granota llega al rescate de una defensa que hace aguas

El Levante UD sumó este domingo un punto en Ipurúa tras empatar 1-1 ante la SD Éibar, con goles de Arbilla, en propia puerta, y Stoichkov. A pesar de no haber conseguido los tres puntos, el conjunto granota sigue vivo en la pelea por el ascenso directo tras las derrotas de Granada y Las Palmas, y a la espera del resultado que obtenga el Alavés este mismo lunes. Sin embargo, el duelo contra los armeros dejó sensaciones agridulces, pues Calleja queda a la espera de conocer el alcance de las molestias de Pubill y Montiel, pero también cuenta con un canterano para reforzar la defensa como es Carlos Giménez. 

Después de que Pubill pidiese el cambio debido a la lesión, el escogido para entrar en el terreno de juego fue Carlos Giménez, que tras varias convocatorias por fin pudo debutar con el primer equipo del Levante en la categoría de plata. El técnico madrileño apenas cuenta con jugadores para conformar la defensa, y es por ello que la cantera se volverá clave en las próximas jornadas. 

Por el momento, el Levante UD cuenta con un total de nueve bajas, entre las que se encuentran los lesionados Brugui, Pablo Martínez, Postigo, Vezo, Mustafi, Pubill y Cárdenas, además de la duda de Montiel, y el sancionado Saracchi. 

En total, Carlos Giménez jugó algo más de veinte minutos en el que fue su estreno en el fútbol profesional, ayudando a los granotas a contener las llegadas de la SD Éibar, aunque no pudieron evitar el tanto de Stoichkov tras el despiste de Róber Pier, por el cual el gallego pidió disculpas a la afición a la finalización del encuentro.