Al Levante Femenino le quedan seis jornadas en la Liga F y el reto de revalidar su condición de equipo de Liga de Campeones lo tendrá que afrontar fuera de la zona continental después de doce jornadas en la zona de privilegio (diez como terceras y dos en la segunda plaza). Las victorias del Madrid CFF (46 puntos) al Athletic Club (45), que llevaba siete victorias seguidas, y el Atlético de Madrid, que venció en el Wanda al Real Betis, han descabalgado a las granotas a la quinta posición, ahora con 44 puntos. Pero todavía queda mucha pelea.
Quedan 18 puntos en disputa y el próximo duelo será en casa del Sevilla, un rival que históricamente le ha puesto en muchos problemas al Levante. A la cita en el Jesús Navas, las granotas llegarán tras empatar en el derbi de Mestalla (1-1) y de caer ante el Real Madrid en una derrota marcada por las limitaciones y la diferencia de recurso y soluciones (2-4). Posteriormente, tras el duelo en Sevilla, al Levante le quedarán cinco citas más: tres en casa (Real Sociedad, Villarreal y Madrid CFF) y otras dos fuera (Levante Las Planas y Granada).
“Venimos con muchas limitaciones. Lo venimos diciendo. En el descanso se nos cae Alba Redondo y tenemos que hacer un cambio. Estamos compitiendo por un objetivo tan importante como es la Champions, con equipos que tienen una capacidad de recursos que no tenemos nosotras. Sigo en lo mismo: seguimos dando guerra, seguimos optimizando todo lo que tenemos. A recuperar todo lo que podamos, ir a Sevilla y volver a intentarlo que es lo que merece este equipo”, reconocía el míster Sánchez Vera tras el último partido en Buñol.
"Nos pusimos por delante y con ocasiones para algo más. El Real Madrid dio un paso adelante en el segundo tiempo"
"Venimos con muchas limitaciones. Te da rabia porque con poquito podríamos competir mucho más pero contento con el rendimiento"#OrgullGranota pic.twitter.com/qx7zypJM5t
— Levante UD Femenino (@LUDfemenino) April 20, 2024
Ante el Real Madrid, el Levante se presentó solamente con 17 jugadoras y 13 con ficha de primer equipo. A las ausencias de Holmgren, Alharilla, Ángela Sosa y Anna Torrodà se sumó esta jornada la de Paula Tomás. En el banquillo había seis granotas, con una guardameta (María Valenzuela) y tres con ficha B (Gabaldón, Bascu y Leyre Secades), además de Estela Carbonell y Daniela Arques. Delante estuvo un Real Madrid que remontó el partido gracias a su mayor amplitud de recursos. Linda Caicedo, bigoleadora, y Maite Oroz, que marcó el cuarto (el 1-4) y le dio aire fresco a la medular, fueron determinantes arrancando desde el banquillo.