Saúl Ñíguez, centrocampista del Atlético de Madrid, volvió este miércoles al trabajo con el grupo, ya recuperado del traumatismo en la rodilla izquierda sufrido en el derbi frente al Real Madrid, y estará listo para el encuentro del próximo domingo contra el Celta de Vigo en el estadio Balaídos.
El regreso a los entrenamientos de Saúl, que se ejercitó junto a los medios centros y los defensas en la sesión de esta mañana, dividida en dos grupos por posiciones por el técnico argentino Diego Simeone, deja la enfermería rojiblanca con sólo Koke Resurrección, que estará unas tres semanas de baja por una lesión muscular. Koke es una de las tres ausencias seguras para la visita de este domingo a Vigo. Las otras dos serán por sanción: el turco Arda Turan y Raúl García, los dos por ciclo de cinco amarillas, después de ser amonestados en el derbi del pasado sábado en el Vicente Calderón. El resto de efectivos está a disposición de Simeone, incluido el uruguayo Diego Godín, que hoy se entrenó por primera vez con máscara para proteger la nariz que se fracturó frente al Real Madrid.