Iker Muniain permanecerá de baja por un periodo estimado de "entre seis y siete meses" debido a la "rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda" que se le ha detectado tras las pruebas médicas a las que ha sido sometido el jugador navarro en Bilbao.
Muniain se lesionó el pasado sábado en la primera parte del partido del Sánchez Pizjuán frente al Sevilla y tuvo que abandonar el campo en camilla, con la pierna inmovilizada y evidentes signos de dolor.
Tras una primera explotación se le diagnosticó una "entorsis" en la articulación y tanto las palabras de Ernesto Valverde como las de algunos de sus compañeros sobre el estado de ánimo y las sensaciones del jugador en las horas siguientes a la lesión hacían presagiar un contratiempo menos grave.
Sin embargo, la resonancia magnética que se le ha realizado a Muniain ha revelado una gravísima lesión que le hará perderse lo que resta de temporada y le impedirá reaparecer al menos hasta octubre o noviembre próximos.
La de Muniain es, además, la segunda baja segura con la que cuenta el Athletic para la final de Copa del próximo 30 de mayo frente al FC Barcelona ya que Óscar de Marcos, también titular habitual en las alineaciones de Valverde, no podrá jugar por sanción el partido que se disputará en el Camp Nou.
El parte médico emitido este martes por el club rojiblanco señala, asimismo, que Ander Iturraspe ha sido también sometido a una resonancia magnética que ha reflejado una "rotura miotendinosa de grado II en el músculo pectínio de la pierna derecha".
La lesión mantiene al centrocampista vizcaíno "pendiente de evolución" aunque es seguro que, junto a Muniain y el sancionado Aymeric Laporte, causará baja el jueves en el partido frente al Valencia en San Mamés.