Illarramendi pide "perdón" a la afición por la goleada encajada en Gijón

El centrocampista de la Real Sociedad Asier Illarramendi ha pedido hoy "perdón" a la afición txuriurdin por la goleada encajada anoche en El Molinón (5-1), en un partido en el que "todo fue negativo" y que ha confiado en que "no se vuelva a repetir"."Fue un partido para olvidar", ha dicho Illarramendi hoy, en la sala de prensa de Zubieta, donde ha admitido que los jugadores de la Real no "dieron la talla en ningún momento".
El jugador guipuzcoano ha expresado su confianza en que el partido de ayer "solo haya sido un accidente", ya que el equipo venía de jugar "medianamente bien" en los últimos encuentros.
Ha admitido que el tercer gol, en el filo del descanso, hizo mucho daño a un equipo que con 2-1 en contra aún tenía opciones de empatar.
En el descanso, los jugadores hablaron de que "no podía seguir la cosa así" y se comprometieron a "salir a tope" para intentar remontar, pero el Sporting metió el cuarto gol y "de ahí en adelante no pudo ser".
La Real dio un serio paso atrás con esta contundente derrota, en la que encajó el gol más rápido de la presente temporada y su goleada más amplia en los dos últimos años.
No hubo nada positivo en un choque que los donostiarras afrontaban con su defensa en cuadro, por las bajas a última hora de sus dos laterales titulares- Yuri y Carlos Martínez- y el equipo vasco queda ahora muy tocado tras el 5-1 de ayer.
El primer gol rojiblanco, marcado a los quince segundos de juego, es uno de los más tempranos de la historia de la competición liguera, aunque todavía queda lejos del gol de Joseba Llorente, logrado con el Valladolid a los siete segundos de juego en la temporada 2007/08.
La amplia derrota se convierte además en el peor resultado de los guipuzcoanos en dos años, desde que en enero de 2014 cayó también por este estrepitoso marcador contra el Villarreal en El Madrigal.
El entrenador Eusebio Sacristán, que lleva ya casi tres meses ejerciendo como técnico blanquiazul, sigue por otra parte sin sumar una victoria a domicilio y ayer dirigió su peor partido a la Real en este tiempo.