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Osasuna busca su adaptación a Primera en fase de construcción

Fermín Zariquiegui

Osasuna, que este sábado perdió en su reencuentro con la Primera División en El Sadar, busca su adaptación a la máxima categoría tras dos años en Segunda, aunque todavía se encuentra en fase de construcción.

"La Primera División te penaliza rápido y todavía no tenemos ritmo de Primera, pero esto no acaba más que empezar y hay que seguir caminando", afirmó el entrenador osasunista, Enrique Martín, al término del partido ante la Real Sociedad en El Sadar (0-2).
Los 'rojillos' aguardaban con expectación su reencuentro con la Primera División en Pamplona tras dos años en los que ha vivido al límite en Segunda: la primera temporada por salvarse del descenso a Segunda B en la última jornada y la segunda por el ascenso contra pronóstico.
A pesar de las buenas sensaciones ofrecidas en su estreno en la temporada 2016/17 en La Rosaleda, donde el conjunto navarro consiguió arrancar un punto, Osasuna pagó caro ante la Real Sociedad dos errores defensivos: una falta de concentración y un autogol que dejaron sin premio a la afición 'rojilla' en un clima festivo en El Sadar junto con los seguidores guipuzcoanos.
Osasuna, aunque es pronto para un análisis profundo, ya que además no ha cerrado su plantilla para su regreso a Primera, se encuentra en construcción para adaptarse a la máxima categoría.
El técnico 'rojillo', Enrique Martín, sigue apostando, como en Segunda División, por un sistema de cinco defensas, con tres centrales y dos carrileros, tres centrocampistas y dos delanteros.
El entrenador navarro, pese a los numerosos fichajes realizados, ha alineado en las dos primeras jornadas a ocho y siete futbolistas de la pasada temporada en el equipo titular, donde la principal ausencia es la obligada por el traspaso de Mikel Merino al Borussia Dortmund.
El conjunto pamplonés, con la misma portería y defensa, a excepción del lateral izquierdo, busca un futbolista que sea la referencia en el centro del campo y guíe el juego ofensivo, para conectar con una delantera que ha cambiado casi por completo respecto al pasado ejercicio.
De Oriol Riera, que regresa a Osasuna dos años después de meter 13 goles en Primera en la temporada 2013/14, y de Sergio León, máximo goleador de Segunda la pasada temporada, se espera una capacidad realizadora que garantice los puntos de la permanencia.
Con Kenan Kodro como único superviviente de la nómina de delanteros de la pasada temporada, tras la marcha de Juan Francisco Martínez "Nino" y Urko Vera, el club espera además la llegada del francés del Newcastle Emmanuel Riviere.
El mejor "refuerzo" para Osasuna será sin embargo el regreso del centrocampista navarro Roberto Torres después de haberse perdido toda la pretemporada por una lesión muscular con la que jugó el tramo final de la pasada campaña.
Torres, el máximo goleador y asistente de gol de la pasada temporada, ya entró ayer en la convocatoria ante la Real Sociedad y el técnico espera su puesta a punto como un factor clave para dar un salto de calidad al ser además determinante en las jugadas de estrategia.
Osasuna, pendiente de la lesión de rodilla de Javier Flaño ante la Real, tiene dos semanas de preparación, debido al parón liguero del próximo fin de semana, para afinar su aclimatación a Primera División, aunque su próximo compromiso será en el Santiago Bernabéu.
Después afrontará dos partidos consecutivos en El Sadar, contra el Celta y el Espanyol, donde ya debe dar la medida de su capacidad esta temporada en su regreso a la elite.

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