El Valencia ratificó con su triunfo en Anoeta ante la Real Sociedad (2-3) su buen inicio de temporada que le tiene situado en la zona de privilegio de LaLiga Santander, en plena lucha con Atlético, Sevilla y Real Madrid, perseguidores del Barcelona, líder indiscutible.
El equipo de Marcelino García Toral, que ya había puntuado en el Santiago Bernabéu en la segunda jornada y que empató también frente al Atlético en la tercera, volvió a demostrar que está en disposición de ilusionar de nuevo a su afición.
Superó a otro rival con aspiraciones y buen juego como la Real Sociedad en un partido vibrante que resolvió a cinco minutos del final el italiano Simone Zaza tras una brillante acción del luso Gonçalo Guedes, cedido por el PSG.
El portugués crece cada día y su relevancia para el conjunto de Marcelino es tremenda con una gran capacidad para el desequilibrio. De hecho una gran acción suya permitió a Rodrigo Moreno abrir el marcador a puerta vacía.
La Real Sociedad tuvo también mucho mérito, porque respondió las dos veces que se adelantó el Valencia (la segunda con un tanto de Nacho Vidal al inicio del segundo tiempo) con dianas de Aritz Elustondo y Mikel Oyarzabal, y mantuvo el tipo cuando se quedó en inferioridad a los 68 minutos por expulsión de Igor Zubeldia.
Curiosamente el Valencia no pudo en superioridad. Cuando perdió a los 80, también expulsado, al francés Geoffrey Kondogbia, encontró la inspiración de Guedes y la eficacia de Zaza que sitúa al Valencia cuarto, a un punto del Sevilla y dos del Atlético y con uno más que el Real Madrid.
Antes, el sábado, el Atlético de Madrid se deshizo del Sevilla (2-0) el Real Madrid venció en Mendizorroza (1-2) el Málaga sumó su primer punto de la temporada al igualar un 1-3 ante el Athletic,y el Barcelona venció con contundencia en Montilivi (0-3).
El Leganés, en su segunda temporada en la máxima categoría, vive momentos más que felices. De momento está en zona europea y sobre todo afianza su continuidad en la elite tras vencer por 0-2 en el campo de un alicaído Las Palmas.
Dos contragolpes conducidos por el argentino Alexander Szymanowski al inicio y al final del segundo tiempo, fueron aprovechadas por el francés Claudio Beauvue y Javier Eraso para que el cuadro 'pepinero' se instale entre los mejores de la Liga.
Uno de los resultados más inesperados de la sesión dominical de la sexta jornada, no solo por el resultado, sino por su contundencia, fue la goleada del Getafe sobre un desconocido Villarreal, al que liquidó por 4-0 en un partido que llegó al descanso con empate a cero.
Los hombres de Pepe Bordalás, que no habían puntuado hasta ahora en el Coliseum Alfonso Pérez, sacaron partido de las facilidades que les concedió la zaga del cuadro villarrealense para darse un festín e instalarse en el ecuador de la clasificación.
Ángel Rodríguez abrió y cerró la cuenta con sendos cabezazos tras un lanzamiento de esquina y de una falta, y Jorge Molina y Markel Bergara completaron el triunfo getafense.
El Espanyol y el Celta aliviaron notablemente su situación con sendas goleadas frente al Deportivo (4-1) y al Eibar (0-4), que quedan en situación inquietante.
El brasileño Leo Baptistao y Alejandro Arribas, en propia meta, encarrilaron el triunfo del conjunto de Quique Sánchez Flores en el RCD Stadium. Aunque el costarricense Celso Borges alimentó las ilusiones deportivistras en el segundo tiempo, Gerard Moreno, con un doblete selló la segunda victoria de la semana del Espanyol.
El Celta salió airoso de su visita a Ipurua al ritmo de balón parado y del tino en esta suerte del danés Pione Sisto. El argentino Gustavo Cabral, el propio jugador de Kampala directamente, y el chileno Pablo Hernández sentenciaron la victoria del conjunto de Juan Carlos Unzué.
El Eibar no encontró respuesta y el también danés Daniel Wass firmó el definitivo 0-4, con lo que el Celta remonta posiciones y deja al Eibar a un punto de la zona de descenso tras encajar diez goles en dos partidos.
Betis y Levante, dos equipos que están mostrando un magnífico nivel este inicio de temporada, cerrarán este lunes la jornada en el Benito Villamarín.