Vila-real (Castellón), 1 jul .- El Villarreal ha entrado formalmente en la campaña 2018-1019 con veintisiete jugadores y algunos movimientos por concretar, sobre todo por lo que respecta a la salida de futbolistas de la entidad.
El club que preside Fernando Roig se ha adelantado a este arranque de campaña con el cierre de cuatro incorporaciones de peso, pero sin dar salida a alguno de los jugadores que se espera abandonen la entidad, ya que solo ha sido traspasado el colombiano Roger Martínez, que se ha ido al América de México.
Con ello, el club castellonense cuenta con un bloque amplío de jugadores que tienen contrato para la temporada que ahora comienza, en el que se encuentran los porteros Sergio Asenjo, Andrés Fernández y Mariano Barbosa.
Además; el club cuenta con los defensas Mario Gaspar, Antonio Rukavina, Álvaro González, Víctor Ruiz, Daniele Bonera, Ramiro Funes Mori, Ruben Semedo, Jaume Costa y Adrián Marín.
Por lo que respecta a al centro del campo están en la nómina del club Bruno Soriano, Javi Fuego, Santi Cazorla, Pablo Fornals, Denis Cheryshev, Alfonso Pedraza, Alfred N,Diaye, Cristian Espinoza, Samu Castillejo, Dani Raba y Roberto Soriano, mientras que los delanteros son Gerard Moreno, Karl Toko Ekambi, Enes Ünal y Nicola Sansone.
De estos jugadores, cuatro son nuevos fichajes, uno llega del filial y tres regresan tras una cesión, con lo que el club mantiene a diecinueve futbolistas de la campaña anterior, ya que solo ha causado baja oficial Roger Martínez, mientras que Ruben Semedo se encuentra en prisión.
Entre los jugadores con ficha, hay casos como los de Antonio Rukavina, Alfred N,Diaye o, Cristian Espinoza, que tienen complicada su continuidad.
El primero tenía la opción de renovar su contrato, pero podría haber decidido salir del club, mientras que los otros dos regresan tras una cesión y la idea podría ser volverlos a ceder, al tiempo que siguen pendientes los casos de Roberto Soriano, Nicola Sansone o Denis Cheryshev, que cuentan con muchas opciones de dejar el club a lo largo del verano.
Así, de la campaña anterior, el club se quedaría con veinte futbolistas con contrato en vigor, a los que se les podrían añadir entre tres o cuatro más, ya que se busca un lateral derecho, un medio centro, un defensa central y un delantero.
El del delantero es el caso más claro, ya que desde el club se reconoce el interés en mantener al colombiano Carlos Bacca, cuya continuidad dependerá de las posibles salidas y del precio de su traspaso, mientras que el resto de demarcaciones son las que se tratará de cubrir en el mercado.
A esta primera plantilla se le deben añadir los casos de los jugadores del filial que trabajan con asiduidad con el primer equipo, tal y como sucede con Pau Francisco, Manu Morlanes, Ramiro Guerra o Samu Chukwece.
Con ello, el Villarreal tiene más o menos cerrado a falta de nueve días para que arranque la temporada, ya que la plantilla comenzará a trabajar el lunes 9.