El Elche CF no podrá contar la próxima jornada en su partido ante el Espanyol de Barcelona ni con los jugadores Fidel Chaves y Diego González ni con el entrenador, Francisco Rodríguez, todos ellos por sanción, mientras que su médico, Paulino Vázquez, y el secretario técnico, Sergio Mantecón, se exponen también a sanciones tras la redacción del acta arbitral.
Fidel vio este domingo ante el Granada (0-0) la quinta tarjeta amarilla de la presente temporada, por lo que será sancionado con un encuentro de suspensión por acumulación de amonestaciones.
Diego González, por su parte, fue expulsado con roja directa, en los primeros minutos de la segunda parte, por “derribar a un contrario impidiendo con ello una ocasión manifiesta de gol”, según reflejó en el acta del partido el colegiado Adrián Cordero Vega. El central gaditano será suspendido con un partido de sanción por esta acción.
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— Elche Club de Fútbol 🌴 (@elchecf) January 2, 2022
También estará sancionado para el partido ante el Espanyol el entrenador Francisco Rodríguez, expulsado tras ser amonestado con dos amarillas, ambas por protestar decisiones arbitrales en los minutos finales del primer periodo.
En el acta se indica: "Una vez le fue mostrada la segunda amonestación, entró en el terreno de juego visiblemente disconforme con la decisión y en dirección a mí, teniendo que ser sujetado y alejado, posteriormente, del área técnica por miembros de su equipo”.
Además, el colegiado también expulsó del campo a Paulino Vázquez, médico del equipo, “debido a los constantes y ostensibles gestos de protesta” tras una decisión arbitral.
Cordero Vega también refleja en el acta que tuvo que reclamar a la Policía que identificara a una persona “que apareció en el túnel de vestuarios en el momento de nuestra retirada en el descanso”, en alusión a Sergio Mantecón, secretario técnico del Elche.
“El mencionado, que tuvo que ser sujetado por personal del club, se dirigió hacia nosotros visiblemente nervioso, profiriendo a viva voz y en repetidas ocasiones la siguiente expresión: "¡Esto es una puta vergüenza!", concluye el acta.