El Celta acaricia la salvación tras remontar a un Athletic sin colmillos

La victoria en el 96' del Cádiz calentó la noche de la jornada intersemanal, la 36 ya de LA LIGA EA Sports, que enfrentó este miércoles al RC Celta y al Athletic Club en el estadio Abanca Balaídos (21.301 espectadores) con posiciones bien distantes en la tabla y el arbitraje del colegiado catalán Víctor García Verdura. Y por eso, los hombres de Claudio Giráldez demostraron jugarse bastante más en el envite que la escuadra de San Mamés que, tras ganar la Copa y sacar la gabarra, se ha ido deshinchando hasta certificar las aspiraciones del Atlético de Madrid de sacar billete para la Champions League.

Los celestes, que empezaron con sólo 2 puntos de ventaja sobre los gaditanos, hicieron valer su necesidad de apuntalar la salvación de la categoría metiendo más gas en la segunda mitad al duelo que el equipo bilbaíno del sancionado Ernesto Valverde... que encima llegó descabezado en ataque, sin Nico Williams, Iker Muniain, Oihan Sancet ni Gorka Guruzeta, aparte de dejar en la banca a Iñaki Williams.

De esta manera, el choque de Vigo, jugado en horario discotequero por mor del prime time televisivo, ha dejado los 3 puntos en manos pontevedresas merced a un marcador final de (2-1), asfaltada la remontada por el gol de Swedberg y el trallazo de Hugo Álvarez tras el inicial gol olímpico de Alex Berenguer, que será de los más bellos de la temporada.

El Celta, que necesitaba 4 puntos para sellar la permanencia, metió 6 cambios en su once titular, por los 8 del Athletic (récord esta temporada en Valverde)

El Celta remontó al Athletic con los cambios

La escuadra local salió mejor, pero los nervios le pasaron factura y poco a poco el Athletic tomó posesión para enfriar el ambiente a base de tocarla entre los 2 centrales. Pero los de Giráldez fueron rearmándose con llegadas de Larsen y Carles Pérez que resolvió Unai Simón. Y las cosas de cuando un equipo está abajo en la tabla, Alex Berenguer hizo un gol olímpico en el 22' con un córner al palo largo que se comió Iván Villar. Ese tanto le hizo pupa a los celestes, que ya no lograron achuchar al meta internacional, salvo con un cabezazo de Carlos Domínguez, antes del descanso pese a su arreón final.

A la vuelta, Giráldez metió de golpe a Mingueza, Hugo Álvarez y Aspas en busca de una reacción, como con el larguero de Strand Larsen, que hizo al Athletic meterse atrás. Valverde, por aquello de ayudar a ganar el Trofeo Zamora, metió al meta Julen Agirrezabala, junto a Iñaki Williams y Raúl García. Los leones se rearmaron y el encuentro alcanzó su esplendor con un ritmo mucho mayor.

Ahí llegaba el empate de Swedberg tras una enorme internada de Hugo, que rompió a Imanol, antes de que el propio canterano gallego subiese el 2-1, en apenas 5 minutos, de un gran disparo desde la frontal superando al joven meta de Rentería. Goles que hicieron justicia, ya que la escuadra vasca hizo un encuentro flojo en el que se encontró con un golazo. Pese al susto del gol anulado a Raúl García por una ¿llega a faltita?, los puntos, bajo el diluvio, fueron para el que más los necesitaba. Como suele ocurrir en estas últimas jornadas.