Duelo de varapalos en Balaídos. El Celta de Vigo, que viene de una polémica eliminación ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, recibe a un Athletic Club que también ha caído eliminado de la Copa del Rey en esta misma semana. En el caso de los vascos, de forma quizá más inesperada, ante Osasuna en su propio estadio.
El Celta vuelve a su estadio tras lo sucedido en el Bernabéu. Un partido muy polémico marcado por el gol inicial de Mbappé, que estuvo precedido de un claro penalti sobre Swedgerg que el colegiado y el VAR, por algún motivo, no se atrevieron a señalar.
En lo meramente deportivo, el equipo de Claudio Giráldez llega en 12ª posición en LaLiga, con un buen bagaje como local pero muy pobre a domicilio. La pasada semana cayó derrotado en Vallecas (2-1) tras cerrar el año liguero ganando a la Real Sociedad en casa (2-0).
El equipo de Ernesto Valverde cayó eliminado del torneo copero en San Mamés ante Osasuna este mismo jueves (2-3). Un duro varapalo que hace al Athletic centrarse ahora en LaLiga y en la Europa League, dos competiciones en las que está muy vivo, pues la semana pasada cayó apenado de la Supercopa en semifinales.
A nivel liguero, la racha es magnífica, si bien es cierto que no juega desde el 21 de diciembre. Aquel día ganó precisamente 1-2 a Osasuna. Lleva diez jornadas consecutivas sin perder, desde el 6 de octubre, y ha sumado 16 de los 18 últimos puntos en juego.