El canterano del Sporting de Gijón, Álex Serrano, ha explicado este martes por la tarde en Deportes Cope Asturias los motivos de su marcha al filial del Espanyol, tras llevarse dos temporadas si apenas jugar con los rojiblancos. “El Sporting tiene un nuevo proyecto, pero al entrenador no le gustan mis características”, afirmó.
El futbolista fue claro en sus palabras: "Estoy hablando aquí para aclarar lo que ha pasado". Añade: "Son muchos años aquí, pero ha llegado el momento de cambiar de aires. Llevo dos años sin jugar. El Sporting tiene un nuevo proyecto, pero al entrenador no le gustan mis características. Me voy a un filial con opciones de subir al primer equipo. Voy a probar allí. Me han demostrado confianza desde el principio y vamos a ver que pasa".
Cronología de lo vivido: “La temporada pasada aposté por quedarme en el primer equipo al igual que Barrera. Pero me di cuenta que me equivoqué. Una lesión me apartó y me paró un mes. Luego se complicó todo. Después llegué a diciembre y no había contado con minutos. Ahí me di cuenta que me había equivocado, lo asimilé. Lo hablé con mi padre y con mi representante para buscar una solución con el club. El entrenador me dijo que confiaba en mí, pero le dije que no pensaba que fuera ser así. Él me dijo que no me iba a dejar salir y tampoco vio bien la opción de bajar al filial. En enero tuve que continuar y seguir así. Este año tuve la opción de bajar al filial y de que si Abelardo me necesitase pues podría subir como uno más y agradecido".
Continúa: "Después de la experiencia del año pasado decidimos que era lo correcto. Lo que pasa que cuando hablamos con el club nos dijeron que por temas de licencias no podía bajar al filial. Entonces tuve que decidir si seguir con el primer equipo. Dejé pasar la pretempotada y hablamos con el entrenador y me dijo que iba a tener mis opciones con el primer equipo. Me dijo que iba a contar conmigo. Luego la temporada no fue así y nos vimos en la misma tesitura que el año pasado. En diciembre volvimos a negociar con el club. Le dije que nos queríamos ir y por el tema que no se podía fichar no podía salir. Tras esto pasaron los meses y no tuve la posibilidad de entrar y aquí me encuentro. Final de temporada y termino el contrato y llega el momento de cambiar de aires".
¿Ha sido difícil tomar la decisión?. "Sí, claro. Cuando dejas el club de tu corazón siempre es difícil dejarlo. El Espanyol nos llamó y nos gustaba la idea. Tenía que mirar lo mejor para mí. Era mi momento. Aún así, seguiré siendo del Sporting. Me llevo muchas cosas buenas".