El Girona se llevó el triunfo de La Romareda y mantiene la segunda plaza de la clasificación gracias a un partido con oficio ante un Real Zaragoza que no supo zafarse de la presión del conjunto catalán.
Salvo en los primeros minutos de partido, en los que el equipo aragonés se mostró superior a su rival, en el resto del encuentro la presión visitante ahogó la salida del balón zaragocista, que en ningún momento pudo combinar.
Curiosamente, cuando comenzó a hacerlo en la segunda mitad porque había bajado la intensidad de su oponente en la recuperación fue cuando recibió el 0-1 y seis minutos después la expulsión por doble amarilla de Cani le dejaba en inferioridad e impedía la posibilidad de reacción.
El Real Zaragoza inició el partido dominando con claridad el balón y el ritmo del partido gracias a buenas combinaciones, poniendo velocidad y con llegadas al área del conjunto catalán con asiduidad que daban sensación de peligro.
Incluso llegó a estrellar un balón en la cruceta tras un contragolpe en el que Ángel centró un balón que dio en un zaguero y acabó golpeando en la madera.
Sin embargo, conforme transcurrieron los minutos los locales perdieron fuelle progresivamente ante la presión rival que consiguió, primero, equilibrar el juego y posteriormente pasar a dominar a partir de la media hora y hasta el final del primer periodo.
A pesar de ello, la posesión fue en la zona medular sin llegar a inquietar en ningún momento la meta de Irureta, que no tuvo que realizar ni una sola intervención porque los visitantes apenas pisaron el área zaragocista.
Tras volver de vestuarios se agudizó el dominio del equipo de Pablo Machín que, a diferencia del primer periodo, sí pisó área y logró preocupar a la defensa 'blanquilla' gracias a su buena presión que le hacía recuperar balones en buenas posiciones.
Pero transcurrido el primer cuarto de hora la insistencia foránea bajó y el conjunto de Raúl Agné pudo combinar mejor que hasta entonces.
Cuando parecía que se abrían opciones para los maños, una falta a favor del Girona acabó rematada de cabeza por Sandaza para inaugurar el marcador en el minuto 68.
Para colmo de males locales, seis minutos después el colegiado concedió la ley de la ventaja en una falta a Cani al que se le fue el balón y acabó cometiendo falta a su vez y siendo amonestado por segunda vez, por lo que fue expulsado.
Las posibilidades locales de rescatar al menos un punto se esfumaron prácticamente ahí ya que, aunque puso corazón, no llegó a la meta de René mientras que el Girona, aprovechando que su rival estaba volcado en busca del empate enlazó una contra que finalizó Alcaraz sentenciando el partido en la prolongación.
Ficha técnica:
0 - Real Zaragoza: Irureta; Isaac, Jesús Valentín, Cabrera, José Enrique (Casado, min.69); Zapater, Javi Ros; Lanzarote (Xumetra, min.57), Cani, Xiscu (Dongou, min.58); y Ángel.
2 - Girona F.C.: René; Maffeo, Ramalho, Alcalá, Juanpe, Aday Benítez; Granell (Alcaraz, min.64), Pere Pons, Portu (Cristian, min.88); Borja García y Sandaza (Longo, min.77).
Goles: 0-1. min.68. Sandaza; 0-2. min.92. Alcaraz.
Árbitro: Areces Franco (Comité Asturiano). Expulsó por doble amonestación al jugador del Real Zaragoza Cani (min.74). Amonestó con tarjeta amarilla al local Zapater y al visitante Granell.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada vigésima de La