El entrenador del RCD Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha reconocido hoy que a su equipo le ha "tocado remar mucho" para no perder el partido en el Heliodoro Rodríguez López ante el CD Tenerife, en la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.
El técnico del conjunto periquito ha destacado que sabían que iba a ser un partido difícil para su equipo, y ha resaltado que sus jugadores encontraron muchos espacios en los primeros quince minutos para jugar "demasiado fácil".
Esta circunstancia, ha agregado, provocó que su equipo se relajara y que, además, con tres pérdidas de balón de los visitantes el Tenerife se metió en el partido.
En cuanto al retraso del partido por los fallos en la iluminación, Quique Sánchez Flores ha dicho que son "accidentes que pueden pasar" en cualquier momento y que los dos equipos lo que querían era jugar.