El entrenador del Sevilla, Joaquín Caparrós, aseguró que afronta "con ilusión" el último partido de Liga, este sábado en casa contra el Alavés, y que en su despedida como técnico desea brindarle un triunfo "a los aficionados sevillistas" porque se siente "en deuda con ellos".Tras dirigir un último entrenamiento vespertino, Caparrós, que espera "sumar los tres puntos ante un gran equipo bien trabajado y con un técnico espectacular (Abelardo Fernández)", recalcó este viernes en rueda de prensa que ya dejó "muy claro" que esta nueva etapa suya como entrenador del Sevilla sería sólo para cuatro partidos.
Subrayó que este periodo le ha resultado "intenso y bonito", y puso como ejemplo de su grata experiencia que "nunca había escuchado el himno" del Centenario, de Javier Labandón 'El Arrebato', "desde el banquillo".
El técnico utrerano se felicitó por haber "compartido vestuario con muy buenos jugadores", que son quienes "han logrado hacer esta mini racha" de siete puntos de los nueve disputados, en los que "era importante romper la dinámica negativa".
Caparrós seguirá en el Sevilla, pero no cree que "la dirección deportiva sea un puesto" ideal para él "porque requiere una preparación".
Consideró que "en otros cargos daría más rendimiento", como por ejemplo "optimizar el talento" de la cantera, donde "hay chicos con un nivel que si no están en cinco años en el primer equipo, es para que a todos nos den una paliza".
El entrenador sevillista recordó que "el Sevilla saca talento", ya que tres de sus canteranos (Jesús Navas, Sergio Ramos y Carlos Marchena) "fueron campeones del mundo con España", y también "hubo una persona que detectó" que en Ramón Rodríguez 'Monchi' -ahora en el Roma- "había talento para la dirección deportiva" y que ha dejado "a chicos en el cuerpo técnico" con "una preparación espectacular".
Caparrós valoró el rendimiento del defensa francés Clement Lenglet, de quien le "ha sorprendido su madurez", y lamentó que no haya sido convocado para el Mundial, pero auguró que "cogerá el premio de ir con Francia a corto plazo".
Subrayó que también que le "agrada" que haya sido convocado por Francia para el Mundial de Rusia el centrocampista Steven Nzonzi, ya que "es para estar contentos tener a jugadores entre los veintitrés elegidos de una de las selecciones favoritas".
El técnico de Utrera usó estos dos ejemplos para destacar el "nivel alto" del plantel, al que se dirigió diciéndole que este verano "muchos estarán en el mundial" y que él, "en la playa", podrá decir que tuvo "la suerte de entrenarlos".
A Caparrós le "ha gustado que todos hablen bien" de él, pero recordó que tiene "el culo pelado, como decía Luis Aragonés, y ya llegó la época del ego", por lo que admitió que "los artífices" de la recuperación del Sevilla "son el cuerpo técnico y los futbolistas".
El preparador hispalense, a quien cuando acabe la temporada le "faltará un partido para los 500" en Primera división, no quiso definirse sobre "qué perfil elegiría para dirigir al Sevilla" la próxima temporada, ya que "el club ha demostrado que sabe elegir", por lo que "seguro que viene alguien con un buen currículum y con capacidad para meter al Sevilla entre los mejores".