Sporting de Gijón y Racing de Santander se dejaron dos puntos por el camino en un partido intenso, de incansable lucha en el que ambos buscaron el triunfo hasta el final. No hubo triunfadores ni vencidos, pero el empate dejó una sensación agridulce a ambos equipos en sus respectivos objetivos. Dubasin adelantó a los rojiblancos en el minuto 2 tras un buen cabezazo y Andrés igualó para los cántabros en el segundo tiempo.
El Sporting no pudo arrancar mejor el encuentro, encontrando el camino al gol en su primera jugada de ataque. Apenas corría el minuto 2 cuando un ataque vertical de los rojiblancos llegó a la banda derecha, desde donde Guille Rosas puso un centro al corazón del área que cabeceó Dubasin al fondo de la red. Con el 1-0 en el marcador, el partido mantuvo un ritmo frenético, con alternativas para ambos conjuntos.
Así, ambos probaron a los guardametas rivales al filo de la media hora con sendos remates desde el interior del área. Andrés Martín la tuvo para los cántabros y Nico Serrano hizo la réplica para los asturianos.
Fue el futbolista cedido por el Athlétic Club el que tuvo en sus botas la mejor ocasión del primer tiempo, en un mano a mano que definió demasiado cruzado, yéndose desviado de la portería de Ezkieta. Una gran ocasión que hubiera supuesto el 2-0 antes del paso por vestuarios.
El segundo tiempo arrancó nuevamente con alternativas en ataque para ambos. Pablo Rodríguez probó fortuna con un chut desde la frontal y Dubasin, en el interior del área contraria, lo intentó con una vaselina sobre la salida del meta cántabro, en ambos casos el balón se fue por encima del larguero en la última ocasión perdonada antes del tanto del empate.
Tras una gran jugada colectiva del Racing por su banda izquierda, Pablo Rodríguez puso un balón raso al corazón del área que Arana dejó pasar muy inteligentemente y que aprovechó Andrés Martín para definir a placer y poner el 1-1 en el marcador.
Ninguno de los dos equipos terminó haciendo méritos tras el gol del empate para llevarse la victoria, si bien el Sporting fue el que más cerca estuvo con una ocasión desaprovechada por Juan Otero.