Un secuestro, un robo fallido y una historia traumática. Alexander Letellier es el tercer portero del PSG. Estaba en su domicilio en la localidad de Yvelines con su familia dentro de casa. Alrededor de las 2 de la mañana, cuatro ladrones entraron. La alarma se activó, pero los delincuentes siguieron con su cometido.
Ya en el interior, secuestraron al matrimonio y a sus dos hijos, de dos y de seis años a punta de cuchillo. Exigieron dinero y joyas, llegando a golpear a su mujer en la cara. El secuestro no duró mucho más ya que llegó la policía tras el aviso de emergencia.
Las fuerzas de seguridad detuvieron a tres de los cuatro delincuentes. Se trata de un joven de 21 años y de dos menores de 16. En comisaría se les requisaron algunos objetos robados en el domicilio del futbolista. Ni el jugador ni su mujer se han pronunciado sobre el asunto.
Da igual en qué país te ubiques que situaciones como las vividas la pasada madrugada en París ha habido y seguirá habiendo en el mundo del fútbol. Hemos visto decenas de casos en los últimos años. El último fue Kurt Zouma, en Inglaterra, pero este año hemos visto casos iguales en la casa de Radamel Falcao o Sergio Ramos. Los futbolistas parecen ser el objetivo número uno de muchas de estas bandas (en la mayoría de las ocasiones organizadas), pero otros famosos tampoco se libran. Hace unos meses conocíamos que habían entrado en las casas de Carmen Lomana o del cantante Antonio José, en Sevilla.
Los expertos aseguran que uno de los motivos por los que se suceden estos robos es porque estas personalidades publican por sus redes sociales cómo son sus casas. Los ladrones pueden conocer cuáles son los puntos de entrada, cómo se distribuye la vivienda e incluso donde están las zonas donde se encuentra el mayor botín.