El Málaga regresó a la Costa del Sol sin incidentes. Entre otras cosas, porque en la madrugada posterior al partido de Getafe adelantó su viaje de vuelta. Aunque el traslado en AVE estaba previsto inicialmente a las 9:35 de la mañana, el equipo salió a las 7:35 de la capital por petición expresa de Muñiz y llegó a Málaga pasadas las 10. Así las cosas, los aficionados que estaban esperando a los jugadores a la hora prevista (cerca de una decena) se encontraron que en el tren que recibieron sólo se encontraban los futbolistas no convocados que viajaron por su cuenta. Algún que otro tímido abucheo (Valdo fue el peor parado) fue todo lo que se escuchó esta mañana en la estación María Zambrano.
