El Málaga del jeque es un equipo comprador. Sin embargo, queda la sensación de que se ha gastado una cantidad exagerada en gente que nunca ha jugado en la Liga (menos Eliseu). 17 millones de euros en el fichaje de nueve hombres, que convierten al Málaga en el quinto club inversor de España detrás de Madrid, Barcelona, Atlético y Valencia.
Pues parece que sí, que el Málaga ahora es un equipo comprador. Eso se desprende de su actuación en el mercado. "Tenemos un presupuesto abierto", decía condescendiente Abdullah Ghubn el pasado lunes. Son las maneras de los dueños árabes, las maneras del Málaga de Al Thani. Desde la llegada del jeque, el club se ha gastado unos 17 millones de euros en fichajes. Al menos, eso dice de manera oficial el propio Málaga.
Eliseu: 2 millones de euros.
Rondón: 3,5 millones.
Sandro Silva: 2,2 millones.
Malagueño: 975.000 euros.
Sebastián Fernández: 3,6 millones.
Galatto: 1,2 millones.
Quincy: cesión.
Rubén: 1,3 millones.
Stadsgaard: 2 millones.
A estas cantidades habría que sumar lo que han costado despidos como los de Pere Martí y Miguel Ángel. Y también lo que cobra Jesualdo Ferreira, que supera los 1,5 millones de euros. Al margen, se pueden considerar parte de la inversión las mejoras de contrato de Jesús Gámez y Apoño. Todo para intentar hacer un equipo competitivo que pueda lograr el objetivo de quedar del décimo en adelante. Porque ya lo dijo Ferreira: "Mantenernos era el objetivo del año pasado. Queremos quedar entre los diez primeros. Hay que dar los pasos para llegar a ser un grande". En cuanto a inversión, actúa el Málaga como tal.
Sólo Real Madrid (74 millones de euros), Barcelona (71,5), Atlético de Madrid (26,8) y Valencia (25,3) se han gastado más dinero que el Málaga en este mercado veraniego. Es noticia que haya inversión, eso es innegable. El malaguismo habría firmado una política tan espléndida después de ver como se fichaba de saldo temporada tras temporada. Pero llegan las dudas cuando se ven nombres como Stadsgaard o Galatto. Verdaderos desconocidos todos a excepción de Eliseu. Ninguno de los otros ha llegado a jugar en Primera División.
Pero no ha sido un verano de grandes dispendios. Al más puro estilo Málaga, los clubes han fichado todo lo que han podido a coste cero. Domingo Cisma y Francis fueron a Santander. Ambos laterales estuvieron a punto de venir a Martiricos. El Sporting se ha hecho con Eguren y Nacho Novo, Osasuna con Soriano y Lolo. La Real, al clásico Tamudo. Ninguno de ellos es una superestrella, pero son buenos futbolistas de Primera, contrastados.