Rafa Gil ya ha dirigido su primer entrenamiento como entrenador del Málaga y ha comunicado a los futbolistas blanquiazules que será el que esté al frente del equipo el sábado en Cornellà-El Prat. Gil ha reunido a los jugadores antes del inicio de la suave sesión de trabajo y les ha transmitido su confianza. Más extensa ha sido la charla de Abdullah Ghubn con los miembros del plantel, a los que ha trasladado su apoyo y les ha pedido unidad y compromiso. El vicepresidente espera que la resurrección del proyecto comience el sábado ante el Espanyol.
"La destitución del entrenador es una situación triste para nosotros. No era cómoda, porque han despedido al que era nuestro entrenador. El fútbol tiene esto, la vida corre muy rápido y ya tenemos que pensar en el sábado ante el Espanyol. A pesar de la tristeza que supone que Jesualdo no esté aquí, tenemos que mirar adelante y preparar el partido del sábado con las máximas ganas y con la ayuda de Rafa Gil. Y a ganar el partido, que lo necesitamos", ha explicado el capitán malaguista, Arnau, tras el choque. El propio Arnau ha ratificado la presencia de Gil en Barcelona: "Viene a ayudarnos y tenemos que darlo todo por él. Estará un partido y todos lo daremos todo para llevar a cabo sus directrices para ganar el partido". El meta catalán ha desvelado algunos detalles de la charla de Ghubn a la plantilla: "Ghubn nos ha dado ánimos. Nos ha dicho que confía en nosotros, que Rafa Gil sería el entrenador, que habría otro técnico cuando se cerrara la negociación y que trabajáramos para sacar esto adelante". El cabeza visible del vestuario ha valorado, además, la más que probable llegada de Pellegrini: "Quien venga me parecerá bien y tendrá nuestro apoyo para sacar esto adelante. El que venga será el mejor para nosotros".
