Camacho y la decadencia del Málaga 2.0

Ignacio Camacho ejemplifica el discreto rol de los fichajes de invierno del Málaga. Dos lesionados (Baptista y Asenjo), dos suplentes (Maresca y el propio aragonés) y un titular venido a menos (Demichelis), amén de Willy Caballero, componen la hoja de presentación del Málaga 2.0. Trece partidos desde que debutaron y trece puntos. Ese es el bagaje. Paupérrimo. Tanto que Pellegrini ha tenido que tirar de los ‘antiguos’ para intentar sacar adelante la dramática situación actual.
Ignacio Camacho es la muestra de la decadencia de los ‘nuevos’. El joven jugador aragonés ha pasado de ser titular indiscutible a desaparecer incluso de las convocatorias. Tras la goleada del Bernabéu, Pellegrini lo ha borrado del mapa. Desde entonces no ha jugado y lleva tres partidos consecutivos sin ser convocado. Pagó sin duda los platos rotos del ridículo aquel en Chamartín. Ahora ha visto como Recio, Sandro Silva y Maresca le han tomado la delantera en las rotaciones. “Es verdad que no estoy muy contento con mi situación, pero lo que importa es el equipo. Es un cambio muy radical. Yo me encuentro bien, entreno bien y sigo danto todo lo que tengo en los entrenamientos y en los partidos, pero el entrenador confía ahora más en otros”, señaló Camacho en Punto Radio.
Camacho reconoció que Pellegrini habló con él tras la debacle del Bernabéu: “Me dijo que había jugadores que podían dar más que yo. No me queda otra que entrenar y ganarme el puesto y la confianza, porque vine aquí para jugar minutos y no para estar en la grada”. “Si no juego es difícil que siga yendo a la selección”, añadió a la vez que sentenció hablando de la ausencia de Asenjo: “Para mí era un gran apoyo, los dos vinimos a la vez y nos fuimos a vivir juntos. Ahora mismo no está e intento apoyarme en otros compañeros”.