Van Nistelrooy ya está totalmente recuperado de la contusión en la rodilla que le privó de estar con el equipo en Heliópolis. El holandés lleva varios días ejercitándose a buen ritmo y aspira a colarse de nuevo en el once de Pellegrini. No lo tendrá fácil, puesto que en los últimos partidos Rondón pareció comerle el terreno y colocarse por delante. Pero los 17.280 kilómetros y los 123 minutos de juego que que se ha metido el venezolano entre pecho y espalda en los últimos días han mermado su ventaja. El hecho de que el partido sea el lunes le beneficia porque
va a tener tiempo suficiente para recuperarse.
Van Nistelrooy se siente en perfectas condiciones para jugar. Y Rondón llega con la ilusión a tope y confiado en mantenerse en el puesto que tantas semanas le costó ganarse. El duelo por el '9' está servido. La última palabra la tiene Pellegrini.