El Málaga se aclimata al Stadion Petrovsky
Los de Pellegrini se han adaptado al estadio ruso, ubicado en una zona abierta de la ciudad y cercana al río Neva, lo que carga de humedad al frío ya existente en San Petersburgo. “El clima va a ser para los dos igual. Es algo atípico para la mayoría de nosotros por la temperatura de Málaga, pero una vez empiece el partido eso se deja de lado. Hay que estar preparado y hacer una buena entrada en calor”, señaló Demichelis en zona mixta tras el entrenamiento.
Y lo dice precisamente el argentino, que ya jugó en este estadio en unas semifinales de la UEFA cuando militaba en el Bayern Múnich. “Es un campo difícil”, apostilla. Sobre todo porque, a pesar de su capacidad reducida (sólo 22.000 espectadores tras las últimas modificaciones), el Stadion Petrovsky, llamado Lenin hasta 1992, tiene a los seguidores más peligrosos de Rusia. Campo frío, afición caliente. “Estamos metidos en el partido y eso no nos tiene que importar”, dijo Portillo, que confesó que “no sería un marrón jugar, para nada. Esto es una satisfacción. El campo está en perfecto estado y mañana se verá un gran partido aunque pasemos un poco de frío”.
El partido medirá dos objetivos bien distintos. El de la supervivencia del Zenit, que se lo juega todo, y el de la coronación del Málaga, que aspira a asegurar la primera plaza del grupo. Además, Eliseu querrá seguir marcando para escalar puestos en la tabla de realizadores de la Champions. “¿Otro gol? Primero de todo está el grupo. Queremos asegurar el primer puesto. El Zenit se juega mucho y mañana entrará muy fuerte. El frío no debe afectar, vinimos un día antes de lo normal para adaptarnos”, finalizó el portugués.