"Tuve varias ofertas donde continuar mi carrera, pero estoy convencido de que puedo ayudar al Málaga y de que aquí mi familia está feliz. Así que disfrutando del club y de su afición, y también mis hijos disfrutan de nuestros triunfos. Me siento estupendamente, disfrutando mucho del fútbol, de los aficionados y sintiendo mucho cariño por el club y por la ciudad", afirmó Santa Cruz, que no duda: "¿Mi plato favorito? Chanquetes con huevo frito y morrones. ¡Está de lujo!".
Santa Cruz habló de las metas a alcanzar esta temporada. "Al inicio el objetivo fue claramente darle estabilidad al club con la permanencia. Hoy viendo cómo va jugando el equipo y cómo vamos mejorando estamos convencidos de que podemos llegar a más. Personalmente, mi objetivo es ayudar al club para que cumplir nuestros objetivos y marcar la mayor cantidad de goles", señaló.
El punta tiene competencia en El Hamdaoui. Ante un comentario de que puede hacer dupla con el holandés, bromeó: "No se lo he pedido a Schuster, pero ojalá lea tu mensaje [risas]. ¿Quién marcará más goles? ¡Buena pregunta! La verdad es que no me lo había planteado todavía, pero espero que sea yo [risas]".
Santa Cruz recordó la experiencia en Champions con el Málaga. "La afición le hace especial al club y después del partido contra el Oporto se podía sentir una felicidad plena en las gradas y un agradecimiento genuino hacia los jugadores. Eso a nadie le pasó por alto y nosotros sentíamos lo mismo. El Málaga, sin duda, tiene una magia especial. El vestuario que vivimos después de ese partido [vuelta de cuartos contra el Dortmund] fue de los momentos más impactantes de mi carrera. La desazón, la tristeza y la incapacidad para entender cómo nos pasó eso... No lo había vivido antes", explicó.