Schuster se viene arriba: "En el Bernabéu igual salimos con dos delanteros"

Bernd Schuster no deja indiferente y se viene arriba, o al menos quiere difundir ese mensaje entre su plantilla y la afición, antes de ir al Bernabéu. Nada de miedos, al contrario, valentía y audacia, según se desprende de sus palabras en una entrevista en Marca, donde llama a morir, si se muere, de pie.

"Todos mis equipos han dado la cara y este Málaga también, incluso en el Bernabéu. Que nadie piense que vamos a plantar el autobús. Si nos meten cuatro, que sea dando la cara, buscándolos arriba, sin riesgos pero con valentía", dice Schuster, que confiesa que pretende dar rienda suelta al equipo ofensivamente, pero que antes quiere llenar el granero de puntos y liberar a la plantilla mentalmente: "Me gustaría dar más aire al equipo, pero ahora es importante sumar puntos para precisamente llegar a lo que queremos. Si estamos en la mitad de tabla sin problemas, y no abajo, los jugadores se irán soltando, tendrán más el balón y jugarán como a mí me gusta. Siempre voy a defender ese fútbol. Olvídese del partido contra Osasuna, íbamos mejorando"."Hace falta que el Madrid caiga en algunas de las trampas. Yo me la voy a jugar seguro,. El Madrid está un poco raro, yo voy a dar caña, voy a estar ahí. No voy a regalar nada. Si me tengo que pelear con Chendo, lo haré (risas)", bromeaba Schuster, que da algunas interesantes claves de lo que puede ser la alineación. Desliza que El Hamdaoui y Roque podrían jugar juntos.
 
"Tendríamos que hacer un gran partido y ellos uno malo. Y aún así te pueden ganar. Que Cristiano no se enfade y se enchufe, que Isco no te encare y te le haga, que Benzema no tenga su día de gloria.... No vamos a inventar nada, pero tenemos que aprovecharnos de alguna situación que nos pueda favorecer. Que el Madrid tenga que defender. Puede que en lugar de con un delantero, como hasta ahora, juguemos con dos y quitamos un centrocampista. Hemos mejorado en el centro del campo, a lo mejor nos la apañamos con cuatro en vez de cinco", razona el alemán para explicar su osadía y por qué confía en dar la campanada: "En el Bernabéu hay que tener presencia en ataque. Si sólo defiendes estás muerto, los 90 minutos allí son más largos, te terminan ahogando. Ellos están raros, vienen de semana de vacaciones, sólo tenían a Diego López para preparar el partido. Muchos jugadores vienen de jugarse la vida con sus selecciones, sé lo que ello supone. Cuesta volver a la realidad. Es un buen momento, un buen momento".