Es Noticia
Espanyol
2-2
Málaga

La Justicia es zurda

Duda celebra su gol
F. Godoy

El Málaga salvado por Duda, como tantas otras veces. Y sujetado por su portero, que ahora se llama Carlos Kameni pero que bien se podía apellidar Contreras o Caballero. El guión del partido ante el Espanyol no encajó con la imagen que nos había servido este equipo en los tres partidos anteriores, pero no se puede negar que tiene mucho de la idiosincracia malaguista.
Costó sudor y lágrimas arrancar un punto ante el conjunto perico, pero hay lecciones que una escuadra joven -por proyecto y por DNI's- tiene que aprender sobre el césped. Hoy aprendió algunas. Curtirse es parte del deporte y de la vida.
Nos enseñó una cara el Málaga de la primera parte en Barcelona a la que no nos tenía acostumbrado. Más torpe que en otras ocasiones, con despistes y falta de concentración y hasta se podría decir que de fe. El Espanyol fue todo lo contrario, un equipo necesitado que sabía lo que quería, harto de tropezar. Mejor, en definitiva.
Kameni ya tuvo que parar una en el minuto seis a Víctor Sánchez y otra a Sergio García, al que señalaron un fuera de juego que no era. Y llegó el gol de Caicedo, un ex para más inri, que no pudo desperdiciar el regalo de Sergio García, que cada día es más jugador.
Después, aunque el Málaga no terminó de ser lo que venía siendo, se entonó algo más. Si no tanto, sí que acumuló alguna que otra llegada. Un centro de Rosales que nadie aprovechó, una gran jugada que terminó con Juanmi rematando de manera defectuosa... Pero también seguían las fugas en defensa. Incomprensiblemente, el mismo Sergio García cabeceó fuera un balón que se había tragado Kameni.
No dio para mucho más, salvo un encontronazo de Javi López con Camacho, que dejó a ambos doloridos y supuso amarilla para el perico. Y dolorido en su orgullo se fue el Málaga, sobre todo Gracia. Así que el navarro tomó cartas en el asunto.
Lo primero fue sentar a Santa Cruz y poner a Amrabat de punta (de entrada, luego iría intercambiando posiciones con Horta y Juanmi). El otro punto que cambió el Málaga fue su actitud. Más fiero, presionando más arriba, forzando errores del Espanyol. Ganó metros y relevancia en el juego.
Aunque el gol no llegó en juego, fue tras un córner botado por Luis Alberto y cabeceado a la red por Camacho. Un día lanzas 20 y no marcas y otros... El fútbol.
Eso sí, el Espanyol no renunció al partido ni mucho menos y estuvo a punto de volver a menear el marcador. Lucas Vázquez probó a Kameni y forzó un saque de esquina. En la ejecución, hasta dos veces tuvieron que sacarla los malaguistas prácticamente de la línea: Kameni y Darder, por este orden.
El choque aumentó sus revoluciones. En ese caos daba la sensación de que el Espanyol se desenvolvía mejor que los hombres de Gracia, que ya había dado entrada a Duda por Luis Alberto precisamente para ganar en pausa y control del juego. Pero el encuentro estaba viviendo una etapa algo caótica y el Espanyol se manejó mejor. Pero ahí andaba Kameni en plan salvador para frenar una jugada ensayada que trató de ejecutar Víctor Álvarez y una de Stuani con todo a favor.
Pero el camerunés no pudo con un cabezazo del propio Stuani, que se anticipó a Sergio Sánchez, tras una falta que, hay que decir, se inventaron los colegiados. Sin embargo, el fútbol también te regala revanchas cuando menos lo esperas. Con el tiempo más que cumplido, Iglesias Villanueva pitó una falta en la frontal del área. Todas la miradas se dirigían a un hombre: Duda. El capitán, una vez más, volvió a demostrar que la clase no tiene edad. Pero la Justicia sí tiene nombre y además es zurda.

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  1. JoKeR

    bienvenido el punto viendo el partido,trabajado partido aunque mantengo la ilusion de que lo mejor esta x llegar,nos falta confianza pero se sta mejorando,al final importante sumar :p