Manolo Novo, el segundo sacrificado de Al-Thani

Manolo Novo ha sido despedido del Málaga. El hasta hoy director general corporativo recibió la comunicación en Zaragoza, donde había asistido junto al responsable de los servicios jurídicos del club, Joaquín Jofre, a la Asamblea General Extraordinaria de la LFP. Novo había quedado como cabeza visible en la dirección general del club tras la salida de Vicente Casado hace escasas dos semanas.

El ejecutivo incluso había mantenido algunas reuniones con posibles caras nuevas del Málaga y se había encargado de algunas funciones representativas en ausencia de Casado, como la de acudir al Foro de Javier Tebas en Málaga o a la propia Asamblea de la Liga este viernes. La decisión, hecha oficial mediante un escueto comunicado (leer aquí) a otra hora intempestiva y contra pronóstico (15:37 horas), se venía rumiando en el entorno de los nuevos asesores en las últimas fechas y finalmente se ha producido.
Es el segundo directivo que sale del club tras el despido de Casado. Husillos también está fuera, pero todavía no se ha hecho oficial. En suma, un descabezamiento total del núcleo ejecutivo que componía el día a día del club en los últimos años. Primero se fue por propia voluntad Shatat, señalado a posteriori por el jeque. Y luego han sido despedidos Casado, Novo y Husillos. En su lugar, ascendió Nasser Al-Thani, vicepresidente y consejero delegado, ha ganado peso desde el verano Ahmed Al-Rajehi, y ha entrado un grupo de asesores externos procedentes de un bufete de Granada con Pedro González Segura como hombre fuerte (conócelo mejor aquí) y posible próximo ejecutivo blanquiazul.
Siempre en un segundo plano, Manolo Novo tuvo época de altos y bajos en el club, al que llegó de la mano de José Carlos Pérez para liderar el apartado financiero. Tras la enfermedad y posterior fallecimiento de éste, Novo asumió más funciones en el Málaga y formó un tándem, también de altibajos, con Vicente Casado. Fue Novo quien ofició, por ejemplo, el desayuno financiero del pasado 30 de septiembre. “La familia Al-Thani está muy orgullosa por todo el trabajo que se ha hecho. Todos cuentan con el apoyo y la consideración de la familia”, dijo Nasser Al-Thani entonces. Sin embargo, el guión ha pegado un volantazo, pausado eso sí, por voluntad de su padre y propietario: Abdullah Al-Thani.
Está por ver qué camino toman ahora los acontecimientos tras el desembolso económico que supondrán para la entidad estos despidos (el contrato de Novo también estaba blindado) y con multitud de decisiones urgentes que tomar en todas las áreas y niveles, no solo en el deportivo y de fichajes. Hay cuestiones relativas a la tercera camiseta, a los abonos de la segunda vuelta o incluso al patrocinador que se encuentran en ‘stand by’. Otra cuestión es saber y ver qué rumbo toman los cambios reestructurares de la entidad, que podrían continuar, aunque tal vez a otro nivel.