Juanpi pasa de nivel y hace olvidar a Amrabat

Juanpi Añor completó de nuevo un encuentro extraordinario. Por tercera jornada consecutiva, el joven venezolano no solo volvió a marcar (tres goles en tres partidos y segundo máximo artillero del equipo), sino que dio un auténtico recital de conducción, visión de juego y fútbol de fantasía. Ha cogido confianza y ya nadie se acuerda de Amrabat, jugador al que le está tocando suplir. Juanpi ha roto el cascarón, ha pasado de nivel.

Porque su partido fue espectacular. Estuvo en todas, marcó el primer gol, inició el segundo y fue el perejil de todas las salsas del Málaga en ataque, un Málaga de paredes y combinativo. Como el de Pellegrini. A alguno Juanpi le recordó incluso a Isco. No es mala comparativa, no, para un Juanpi que fue tendencia durante todo el partido en las redes sociales.

Su primer gol fue propio de un supercrack, quebrando a Vergini con aparente facilidad y definiendo como los grandes. Luego filtró un pase a Charles que, de primeras, le regaló el gol a Atsu. Y no sólo eso, forzó la amarilla de Lacen, que tuvo que ser cambiado al descanso. Y en la segunda parte ejecutó algún que otro pase que Charles no convirtió en gol porque Guaita estuvo soberbio.
Juanpi pedía el balón, estaba a gusto. Disfrutó e hizo disfrutar con sus conducciones, taconazos, combinaciones y pases. Y pidiendo la pelota, con confianza, asumiendo galones y jugando por fuera, en una posición que no es la suya específica. Gracia, quien más lo avalaba en privado, quiere más de él: “Se está sacrificando para hacer un trabajo por fuera para que el equipo esté equilibrado. Demuestra lo que es, pero puede hacerlo mejor. Voy a ser crítico con él”.