Se dice en Málaga que hay una cierta maldición que persigue a los futbolistas que se van del equipo blanquiazul, especialmente los que triunfan en La Rosaleda. Nunca vuelve a ser lo mismo para la mayoría y casi todos suspiran por volver. No es una ciencia exacta, pero tampoco una leyenda urbana. En muchos de los casos coincide.
El verano pasado dejaron la disciplina malaguista un abanico importante de futbolistas: Juanmi, Samu Castillejo, Samu García, Sergi Darder, Luis Alberto, Javi Guerra y Sergio Sánchez. Y no a todos les ha ido bien. El que más ha brillado en lo individual, Javi Guerra, se ha ido a Segunda División con el Rayo Vallecano.
Juanmi lo ha pasado francamente mal en Inglaterra y ya tiene las maletas hechas para regresar a la Liga. A Samu García y Sergio Sánchez las lesiones han fastidiado que esta temporada 2015-16 haya sido mejor. Luis Alberto ha tenido una campaña 'gaseosa'.
A Darder no le ha ido mal del todo, pero sí durante un tiempo recibió bastantes críticas en Francia. Su alto coste exigía un rendimiento mayor y más rápido. Y Castillejo comenzó con muchísima fuerza, luego tuvo una fase en la que perdió el sitio y finalmente ha tenido cierta regularidad.
Algunos de ellos están como locos por volver a Martiricos, otros hasta anduvieron cerca de hacerlo en el mercado invernal. Pero una cosa está clara, todos ellos brillaron más en la 2014-15 en el Málaga que este año deportivo que ya acaba.