El Málaga mira a La Meca

Empieza el noveno mes del calendario musulmán y llega el Ramadán, un mes en el que los musulmanes ayunan a diario desde que amanece hasta que se pone el sol en virtud de su fe y creencias. Varios integrantes del Málaga se suman cada año a esta práctica, desde dirigentes hasta jugadores, aunque algunos deciden no seguirlo amparándose en su deber como profesionales.

El propio presidente y propietario del club ha vuelto a su país como motivo de este mes ayuno religioso, algo que ya ha hecho en años anteriores, aunque tiene previsto volver a la Costa del Sol cuando termine. También cumplen con el Ramadán sus hijos Nasser y Nayef, consejeros de la entidad, así como otros asesores de la familia de creencias musulmanas. 
Los jugadores musulmanes también cumplen con esta práctica salvo alguna excepciones en casos de competiciones de alto nivel durante ese mes. En el Málaga, por ejemplo, Tighadouini, que aún pertenece al club blanquiazul, Mastour y Atsu siguen esta tradición, estos dos últimos incluso han publicado un mensaje en sus redes sociales deseando un buen Ramadán a todos los musulmanes. 

Y no son los únicos, ya que muchos jugadores de alto nivel como Benzema, Ozil, Keita, Mustafi, Dzeko, Yaya Toure o Ribery cumplen con el ayuno durante este mes. En los últimos años se ha hablado mucho de las posibles consecuencias de compaginar esta práctica con el deporte de alto nivel, aunque la realidad es que no hay estudios definitivos que demuestren si perjudica o no al futbolista.