El Cangrejo que llegó del Leganés

Henrique Guedes da Silva, conocido popularmente como Catanha, es uno de los nexos de unión entre el Málaga y su próximo rival en la Liga, el Leganés. Sí, porque el delantero brasileño jugó en el conjunto madrileño un año antes de incorporarse a la disciplina del conjunto blanquiazul.

El Cangrejo Rojo, como se le apodaba, fue fichado por el Salamanca en 1996 tras su primera experiencia europea en Os Belenenses. En Portugal hizo 12 goles en 13 partidos y había puestas muchas expectativas en él. Pero en el conjunto castellano tan sólo firmó un tanto en 13 encuentros. Así que salió a préstamo.
En el Leganés comenzó a cuajar. Disputó 34 partidos y firmó 14 goles, unas cifras serias. Así que el Málaga, recién ascendido a Segunda División A pero con un proyecto ambicioso que pensaba en el ascenso, incorporó a sus filas a Catanha. El brasileño voló en ese curso mágico: 26 goles en 40 partidos. Dos años que junto al siguiente con el Málaga en la élite (24 goles en 33 partidos) cambiaron su vida para siempre.
De aquella época se recuerda mucho más que Catanha tenía como compañero a un chico que quería comerse el mundo y que había sido cedido por el Madrid y que se llamaba (y se llama) Samuel Etoo. Aquel Lega era entrenado por Pedro Braojos y tenía algún clásico como el portero Unanua. El camerunés, de 16 años, jugó 28 partidos y marcó tres goles.