El Málaga ha hecho oficial la dimisión de Juande Ramos como entrenador blanquiazul. Después de unos últimos días de una actividad frenética, club y entrenador han puesto rúbrica a su desvinculación contractual y el manchego ya es, a todos los efectos, parte del pasado malaguista. Juande notifició su decisión a los dirigentes del club muchas horas antes de que el jeque lo anunciase vía Twitter el pasado jueves. Pero fue ese tuit de Al-Thani el que desencadenó el gabinete de crisis en la entidad.
Sin éxito, algún miembro del Málaga intentó que Juande diese marcha atrás, pero la decisión del técnico era firme desde el primer momento. Las partes cerraron el acuerdo hace ya bastantes días y a nivel económico, según las fuentes del club consultadas, no ha habido ningún problema. En ese sentido, Juande ha dado todas las facilidades para no enturbiar su marcha.
Con el acuerdo apalabrado desde el viernes, Arnau inició hace días una carrera exprés por encontrar el sustituto adecuado para Juande. Óscar García, Sergio González y Rubi figuran entre los candidatos a ocupar el banquillo blanquiazul. En un principio, el objetivo era que la plantilla empezase a entrenarse en el regreso de vacaciones ya con el técnico que va a asumir el control del equipo hasta final de temporada. Pero eso no sucederá así. El fichaje del nuevo entrenador aún no está cerrado y el Málaga volverá al tajo sin el sustituto de Juande Ramos.
A esta hora, Óscar es el favorito del club. Pero su desvinculación del Red Bull Salzburgo no se antoja fácil y su agente trata de desbloquear la situación para que el catalán pueda enrolarse en el proyecto del Málaga. El director deportivo blanquiazul sigue trabajando contrarreloj.