El Málaga monta un circo y le crecen los enanos. El conjunto blanquiazul ha encajado 11 goles en los tres últimos partidos y la defensa está en el punto de mira. Además, el Gato Romero está ante una situación complicada, ya que las bajas no le permiten hacer muchos cambios para buscar esa solidez atrás que tanto demanda el equipo.
Así, frente a la Real Sociedad, el técnico uruguayo no podrá contar con los lesionados Weligton, Miguel Torres y Ricca. Tampoco está disponible Koné, que debutará este sábado con Burkina Faso en la Copa África, por lo que para el eje de la zaga los únicos centrales puros de la primera plantilla a disposición del Gato son los jóvenes Llorente y Mikel Villanueva. El primero volvió a fallar ante el Celta y es uno de los señalados, mientras que el venezolano tampoco termina de aportar esa seguridad defensiva que necesita el conjunto blanquiazul.
Sin embargo, Romero tiene dos alternativas para formar una pareja de centrales diferente a la citada anteriormente: Camacho y Luis Muñoz. El aragonés ya ha jugado en esa posición en alguna ocasión, tiene la suficiente experiencia para no achantarse y domina muy bien el juego aéreo, aunque retrasar al maño podría generar un problema más en la medular, que tendría que ser repoblada. Por otro lado, el charrúa también tiene la opción de apostar por el canterano Luis Muñoz, que jugó algo más de 20 minutos en el Camp Nou en los que no desentonó. De momento no jugó este miércoles en el duelo aplazado del filial.
A la espera de posibles refuerzos para la parcela defensiva, el Gato tiene lo que tiene y las bajas de Miguel Torres y Ricca suponen otro quebradero de cabeza más para el uruguayo, que debutará como entrenador del Málaga en La Rosaleda el próximo lunes ante la Real.