El primer mes de Romero en la oficina

Marcelo Romero cumple un mes al frente del Málaga. El técnico uruguayo tomó el control el pasado 28 de diciembre y celebra su primera efeméride como entrenador del equipo blanquiazul. El punto conseguido en Pamplona ante Osasuna, sin ser un empate para celebrar, sí ha supuesto el primer resultado positivo del equipo en la era Romero. Y es que el charrúa no sabía aún lo que era puntuar al frente del proyecto.

Un punto de 12 es un bagaje pobre para las aspiraciones del Málaga. Pero el calendario no ha sido nada generoso en este comienzo de año con el Málaga. Y también es cierto que las sensaciones emitidas por el equipo han ido mejorando notablemente en los últimos partidos. Si ante la Real Sociedad el equipo tocó fondo en cuanto a inoperancia y falta de intensidad, los encuentros en el Santiago Bernabéu y en El Sadar han mostrado a un Málaga más solvente, más sólido en tareas defensivas y con presencia en ataque, esto último a pesar de la baja de su goleador y buque insignia esta temporada, Sandro.
Luis Hernández y Martín Demichelis debutaron como titulares este viernes ante Osasuna. Y la puesta de largo de ambos como pareja de centrales resultó satisfactoria. El Málaga fue mucho más sólido de lo que lo había sido hasta ahora esta temporada. Ambos dejaron un buen sabor de boca en El Sadar, especialmente Luis Hernández, que se mostró perfectamente integrado en el eje de la zaga y pudo exhibir su poderoso saque de banda en la acción que supuso el 1-1, obra de Camacho.
Romero celebra su primer mes en la oficina con síntomas de mejoría en su equipo pero también exigido por la necesidad de sumar puntos desde ya de forma obligatoria. En ese sentido, el choque del próximo sábado ante el Espanyol se antoja determinante para que el proyecto del uruguayo al frente del Málaga pueda asentarse en base a buenos resultados, algo en lo que siempre ha insitido el propio Gato.