En el marco del Día Mundial contra el Cáncer, el Málaga tuvo un bonito detalle con el pequeño Pablo, un niño malagueño de siete años que sufre cáncer. El club, a través de su Fundación, le invitó junto a su familia a presenciar en La Rosaleda el Málaga-Espanyol, cumpliendo así uno de sus sueños.
La Cala del Moral se ha volcado con la familia del pequeño durante las últimas semanas para ayudar económicamente a los padres, que están luchando junto a Pablo desde que se le detectó el tumor a los nueve meses de vida.
Esta misma semana, el pequeño fue arropado por el Unicaja y conoció a los jugadores y al cuerpo técnico cajista en el Carpena. Y este sábado le ha tocado visitar La Rosaleda gracias a la invitación de la Fundación del Málaga. El pequeño pudo hacerse la foto inicial con el equipo y también conoció a Weligton y Basti, que estuvieron charlando con él y animándole sobre el césped.