Martín Demichelis ha vuelto con el pie derecho al Málaga. Había dudas sobre cómo se le recibiría, pero desde su convincente rueda de prensa comenzó a cambiar el aire. Para los más escépticos, su rendimiento en sus dos primeros partidos y medio han revelado que ha mejorado lo que hasta ahora había en el centro de la defensa malaguista.
Demichelis pasó por los micrófonos de Cope Málaga es jueves y dejó muchas reflexiones interesantes, desde el punto de vista personal y grupal. "El desafío de volver significa mucho, es muy grande. Tener que hacerlo bien es una gran responsabilidad, lo pasado es pasado. La gente seguramente me quiera ver como en aquel Málaga de Pellegrini y me va a exigir lo mismo o más pese a que tengo más edad. Volver es un desafío muy grande", insiste Demichelis, que Me sentí cómodo en los dos partidos en que me tocó jugar. No se consiguió el objetivo colectivo y eso me entristece. No me gusta hablar de mí, pero me sentí bien".
El central argentino dice que ya disfruta de pequeños detalles cuando ve el final de su carrera. "Me ilusiona en el día. Los jóvenes no entienden que esta profesión pasa muy rápido. Estoy en mi etapa final, valoro la hora antes y después de cada entrenamiento. Lo que significa planificar mentalmente y junto a los compañeros un partido. Volver a jugar en La Rosaleda, justamente ante el Espanyol en el que había estado unos meses, me motivaba. A pesar de no ganar, estamos en un camino con la fe para hacerlo bien", relata Demichelis, que bordéo el gol: "Uno siempre tiene la ilusión de marcar, no acostumbro a hacerlo. Hice 10 goles en mis años en Málaga, fueron significativos. El gol ante el Panathinaikos fue muy lindo. Fue el 1-0 y después vino el 2-0 y fuimos tranquilos a Atenas. Recuerdo otro en Valladolid, vine desde Argentina porque murió mi padre. Todo el estadio hizo un minuto de silencio".
Demichelis habló de temas variados:
Evitar al descenso: "Cuando vine el Málaga en 2011, el equipo estaba en zona de descenso, así estuvimos en enero, febrero y marzo. Haber peleado por esa salvación fue una de las enseñanzas más significativas de esta profesión. Había luchado por títulos en River y Bayern. Y aquí peleé por lo contrario. No rendirse, otra historia, fue muy lindo".
Expectativas: "Quizá había gente con la lupa, pensaba que para qué vino, que si está viejo... Insistí mucho con la posibilidad de venir. Si físicamente estoy bien aún puedo ayudar. Me ofrecí mucho, agradezco a todos los que hicieron fuerza para regresar. Tenía ilusión por ayudar a los más jóvenes, al equipo".
Dorsal: "Me hubiera gustado lucir el 5. Yo jugaba en el medio y en la numeración argentina es el 5 lo que aquí llaman el 6. El número 3 significa muchísimo en esta institución, lo hablé antes con Weligton y ojalá la pueda representar como él".
Más allá del 30 junio: "Vivir sí tengo decidido vivir en Málaga cuando acabe, pero es un pecado pensar más allá del siguiente partido. Villarreal, Villarreal y Villarreal. El tiempo pasa así rapidísimo y cuando nos damos cuenta estamos en junio. Ahí se analizará si seguir es una opción o no".
Luis Hernández: "Me sorprendió en el día a día. Es muy técnico, a los dos días salimos a jugar hablando cinco conceptos y nos supimos entender. A pesar de no conocerte, le dije que somos hermanos, los centrales deben funcionar así".
Segunda etapa: "Para mí era un deseo muy grande poder volver y retirarme acá. Tenía River, del que soy hincha, o Málaga para retirarme. Me dolió mucho todo lo que terminó pasando. De ese plantel de la Champions nadie se merecía ir mal y sentía que no había salido de la mejor manera. No entraré otra vez en detalles. Quería volver y me ofrecí de forma casi gratuita, como explicó Arnau y le agradezco al Málaga y a las personas poder vivir estos momentos".
Manchester: "Jugué en una Liga que muchos deseamos participar, se habla de la intensidad de la Premier, otro fútbol diferente. Con un entrenador que ya me conocía, tenía la exigencia de tener que hacerlo bien. Cuando todos pensaban que iba a ser suplente fui titular, ganamos Liga y Copa y me llevó a la selección y jugué una final del Mundial".
Bienestar: "En Málaga uno viene y parece que vivió toda la vida. Yo viví dos años y medio muy fuertes. Mi hija es andaluza y vamos a tener otra que nacerá aquí en breve. La familia está bien, espero mi tercer hijo, los niños aún no fueron al colegio, pero la adaptación es muy fácil".