Diego Llorente florece con Míchel

Ha tardado en llegar, pero ese Diego Llorente que se esperaba cuando firmó en verano por el Málaga parece haber llegado. Casualidad o no, ha sido de la mano de Míchel cuando el central madrileño ha ofrecido su mejor versión desde que viste la elástica blanquiazul. La mejor prueba de ello fue su notable actuación ante el Barcelona, un encuentro en el que se le vio con más confianza y más expeditivo que nunca. 

Llegó como uno de los fichajes más ilusionantes cara a este curso. Internacional con la Selección (debutó al igual que Pablo en el amistoso ante Bosnia), pieza importante en el Rayo de Jémez pese al descenso y canterano en el que depositaban muchas esperanzas en el Real Madrid. Sin embargo, la temporada de Llorente no ha estado al nivel de lo esperado. Cometió errores importantes en los primeros partidos y entró en una espiral negativa que no mejoró con la llegada de Romero. El Gato apenas lo alineó pese a que siempre tuvo un buen concepto de él y se quedó en la grada ante Osasuna, Espanyol y Villarreal. 
Llegó Míchel, y en el primer partido siguió apostando por la pareja de centrales formada por Luis Hernández y Demichelis, pero el argentino quedó señalado ante el Alavés y a Llorente se volvieron a abrir las puertas de la titularidad ante el Leganés, un partido que a la postre ha servido como punto de inflexión para él. El técnico parece haberle transmitido esa confianza que no había tenido en toda la temporada, y el zaguero ha demostrado en los últimos encuentros que puede rendir de manera interesante.
Su mejor actuación fue este sábado ante el Barcelona con cuatro duelos ganados, tres despejes y dos robos. Frenó a Luis Suárez con la ayuda de Luis Hernández (se intercambiaron la posición) y también a Messi y Neymar cuando hacían diagonales hacia el centro. Con Míchel ha llegado la mejor versión de Llorente, que se ha ganado la confianza del entrenador y que ha adelantado a Demichelis y a Mikel en el último tramo liguero.