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El ejemplo de Boyko

D.M.

Denys Boyko es todo un ejemplo de deportividad, de compañerismo y de profesionalidad. El portero ucraniano no está teniendo una temporada brillante a nivel individual, ni mucho menos, pero más allá de ello es admirable la forma en la que está asumiendo su suplencia y cómo se muestra como el más feliz de todos en los momentos de alegría como el del pasado sábado tras ganarle al Barça (vídeo superior). Está súper implicado y se le nota, cuando lo fácil sería dejarse llevar (no hay que olvidar que está cedido por el Besiktas).

El internacional ucraniano, el idioma nunca ha sido un obstáculo para él desde que llegó, fue el primero en llegar a Kameni tras el pitido final de Gil Manzano el sábado y abrazarse con él para felicitarle por su partido ante el Barcelona (foto adjunta). Ser competidores por un puesto no es un problema para que Boyko, suplente del camerunés, se muestre y sea un excelente compañero. No es sencilla su situación, pero la asume y la encaja con una profesionalidad apabullante.
También es de los más felices en el banquillo y en el vestuario, como se refleja en el vídeo de la celebración que difundió el club. Y eso que Boyko, como decimos, no ha tenido una temporada agradable. Llegó al final del mercado de verano, avalado por Juande Ramos, y pagó los platos rotos por la mala relación entre el manchego y la grada. En su último partido, el de Copa ante el Córdoba que propició la dimisión de Juande, fue ridiculizado por un amplio sector de su propia afición.
Boyko lo pasó mal, recibió el apoyo unánime del vestuario, y no bajó la guardia en los entrenamientos, aunque el Gato volvió a colocar a Kameni de titular. El camerunés es ahora un héroe, pero hace unas semanas su bajo momento de forma era motivo de debate público y se especuló con que el ucraniano tenía opciones de volver a la titularidad. Pero Míchel siguió apostando por Kameni, y Boyko ha seguido trabajando en la sombra, siendo un ejemplo para todos y un gran compañero de vestuario.

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