El futuro de Sandro Ramírez es el principal enigma por resolver en cuanto a la planificación del Málaga para la próxima temporada. El delantero canario tiene sobre la mesa un sinfín de propuestas de España, de la Premier League y alguna también de Italia, y todo apunta a que el del Real Madrid será su último encuentro con la camiseta del Málaga. Míchel llevaba semanas tratando de convencerle con un proyecto y una planificación deportiva a su medida, un equipo que gire en torno al goleador.
El Málaga le planteó una subida salarial que doblaba aproximadamente su actual contrato. Las principales diferencias para que ese acuerdo para la mejora del contrato del delantero prospere radican en el importe de la cláusula de rescisión, que actualmente es de seis millones de euros.
Tanto el director deportivo, Francesc Arnau, como Míchel hace días que se muestran pesimistas con la continuidad de Sandro Ramírez. Y así lo ha ratificado el propio técnico en la rueda de prensa previa al choque contra el Real Madrid cuando le han preguntado cómo iban las velas que iba a poner para que su 'killer' se quedara en La Rosaleda: "Se me están acabando, intentaré cargar unas cuantas en Madrid que voy a San Antonio y ponerlas. La situación está mucho más complicada para su continuidad, la próxima semana va a ser fundamental. A pesar de las plegarias y todo eso... Es complicado. Eso no quita nada para ver las ganas que tiene el jugador de competir, jugar y quedarse aquí, pero...".
El futuro de Sandro en Málaga se complica. Como apunta Míchel, la próxima semana se antoja fundamental para conocer qué colores defenderá finalmente la próxima temporada.