Más tiempo juntos

Míchel ha devuelto la ilusión al malaguismo. El técnico madrileño ha liderado un brillante final de temporada y ya prepara la nueva campaña, en la que contará con la ‘ventaja’ de empezar desde el principio, con una plantilla en la que tendrá participación directa y con la posibilidad de arraigar su método desde el día cero. Así, una de las novedades que el entrenador blanquiazul pretende implantar es la de que los jugadores coman juntos tras los entrenamientos en el Estadio Ciudad de Málaga.  

Se trata de una modalidad muy habitual en el fútbol inglés y que empieza a expandirse en España (equipos como el Éibar ya la llevan a cabo). El Málaga ya viene realizando los desayunos de forma colectiva y la intención de Míchel es añadir también el almuerzo con el objetivo de soldar más los lazos y que el equipo pase más tiempo junto, además de mejorar el hábito alimenticio de los jugadores. El equipo que come unido permanece unido.

Reformas en el Ciudad de Málaga

Para ello se debería acondicionar en el Ciudad de Málaga una zona específica. No serían las únicas modificaciones que se llevarían a cabo en el recinto malagueño, que igualmente se está sometiendo a reformas para dotar de más identidad malaguista a la instalación, al igual que se ha hecho con el Anexo a La Rosaleda. Entre dichos trabajos también se pretende dotar de más privacidad a los entrenamientos del Málaga y así evitar mirones de equipos rivales. Se quiere cuidar hasta el último detalle para optimizar todos los recursos.
Cabe recordar que en la primera fase de la futura Ciudad Deportiva de Arraijanal no está incluido el primer equipo, por lo que el Ciudad de Málaga, instalación muy del agrado de Míchel y de su equipo, seguirá siendo el lugar de trabajo por varios años todavía.