La Rosaleda (llena) mola

Le gusta a Míchel alentar a la afición en sus redes sociales. Uno de sus sellos es poner el hashtag #LaRosaledaMola. Pues sí, La Rosaleda de por sí mola, pero si encima están las gradas llenas... Porque el Málaga comunicó poco antes del comienzo del encuentro que se habían agotado las entradas para el partido contra el Éibar de esta primera jornada de LaLiga Santander.

La afición del Málaga volvió a demostrar que está con el equipo desde el principio y a pesar de algunos factores (ventas de jugadores franquicia, falta de fichajes, algunos cruces de declaraciones...) van a muerte. Un lleno un lunes a las 22:00 horas es algo casi insólito. Además, con un rival de los no llamados 'grandes', que suele tener más tirón.
Se palpaban las ganas de fútbol, con un buen ambiente desde mucho antes que comenzase el choque. La temperatura animaba también a ello. Las únicas calvas que se veían era en la zona reservada para la hinchada visitante, que esta temporada ha pasado de estar en la esquina de Preferencia con Fondo. Donde sí que no había calvas era en el césped de La Rosaleda, que simulaba una alfombra.
Camisetas y más camisetas blanquiazules, donde hay que destacar el tremendo éxito que ha tenido la primera equipación para este curso. El hambre de fútbol quedó patente de manera definitiva en la primera acción de ataque de Borja Bastón. Rugidos de boquerones. Los 24.000 y los que se sumaron durante el día de hoy.
Por otro lado, reseñar que la Grada de Animación, compuesta por las peñas Frente Bokerón y Malaka-Hinchas, cumplió con lo que anunció hace unos días. Como protesta por los horarios, los componentes de Gol Bajo permanecieron sentados y sin animar.